Cuartel emocional
El tarro de las esencias
Aldama no es Morante, pero el jueves destapó el tarro de las esencias también, en este caso cabría decir que destapó un pote de basuras, de heces fecales que salpican a casi todos
Malamente recuerdo el toreo de Curro y de Rafael de Paula, porque ha pasado el tiempo y la madurez en el conocimiento de la tauromaquia se va adquiriendo con los años, como todo en la vida. Pero sí me acuerdo de una faena de Morante en El Puerto de Santa María que nos hizo llorar de emoción porque, efectivamente, había destapado el tarro de las esencias y toda su sabiduría salió a aromar la plaza con el capote, la muleta y la espada. Aquello fue el delirio y en muchos momentos no pudimos evitar que se nos humedecieran los ojos por el arte que se estaba derramando sobre la arena, por la delicadeza que destilaba cada movimiento, por sus gestos hacia los tendidos, por la nobleza del toro. Nunca volveré a sentir lo mismo porque en la vida hay momentos que no se pueden repetir, siempre hay cosas irrepetibles, sentimientos irrepetibles, y un nuevo intento sería otro diferente, que no dudo que sería bueno también, pero aquello se nos grabó en las venas para perdurar en el tiempo.
Aldama no es Morante, pero el jueves destapó el tarro de las esencias también, en este caso cabría decir que destapó un pote de basuras, de heces fecales que salpican a casi todos. Pocos se libran del pringue, y aquí sí que nos esperan nuevas faenas que disfrutar, porque el declarante promete presentar documentación detallada de las acusaciones que vierte sobre Sánchez y sus comparsas, de los sobres con dinerito cash que ya nos gustarían a muchos (yo, que nunca tengo un euro en efectivo), de los agradecimientos del presidente por los servicios prestados y de su papel de chófer B; de la conexión con Begoñez, Marlaska, Montero y hasta con la Calviño, que tan contenta está como presidenta del Comité Monetario y Financiero Internacional del FMI (¡quién pillara un cargo de ese estilo!), hasta incluso Teresa Rivera. ¿Qué dirán ahora en Europa de todo este melocotón puesto encima de la mesa de Pedraz, tan alejado de la frivolité después de romper con la marquesa viuda? La verdad es que estamos viviendo un momento confuso, ruinoso pero divertido ahora que el melón está abierto. Aldama habla de que todo está conectado y la prueba es él mismo. A ver por dónde empezamos el pastel y qué escapatoria encontrará Pedro (Marina, no pronuncies su nombre) el prestidigitador. Lo que sí es cierto es que el comisionista ha desmontado desde la raíz el argumentario bajo el que se protege y se ampara (en falso) el partido socialista, quien, de momento ha sacado en el Congreso y a duras penas nuevos castigos hacia la ciudadanía, con el impuesto a la banca, la promesa de gravar a las energéticas, y, en última instancia se salvan los seguros médicos (menos mal), y el diésel. Resulta chistoso que cuando se les pregunta salen con respuestas a cuestiones diferentes, como, por ejemplo, hablan del rescate necesario a Air Europa cuando se les habla de las constantes reuniones en el ministerio de transportes donde se reunían Ábalos, su número dos Pedro Saura, Koldo, el declarante, y de todo esto y de sus irregularidades informaban puntualmente a Moncloa. Episodios que iremos conociendo cuando Aldama saque toda su documentación… si es que no le mandan antes una cabeza de caballo.
CODA. El tarro de las esencias cinematográficas lo destapó Francis Ford Coppola en los años setenta, y a todos se nos siguen humedeciendo también los ojos con El Padrino I, II y III. En este caso sí funcionaron tres faenas bien hechas. E inspirándose en Don Corleone, en Sicilia, a un empresario lo están intimidando también con el mismo sistema: una cabeza de caballo en el asiento de una excavadora y los restos de una vaca preñada y su cría. En Rusia Putin suicida a sus opositores tirándolos por la ventana o ahorcándolos en su celda. Ahí lo dejo.