El álbum que Barcelona regaló a Franco aparece en una subasta

A lo largo del tiempo en el que tristemente estuvo en el poder gobernando un país como un cuartel, el general Franco visitó un total de quince veces Barcelona. De uno de esos viajes a Cataluña, se realizó para el dictador un libro de una tirada limitada a un ejemplar, regalo pensado para tan peculiar lector de "El Coyote" y poco más. La iniciativa, promovida por Felipe Acedo Colunga, gobernador civil de la capital catalana, represor confeso y palmero mayor de Franco, es ahora el protagonista de una subasta que tendrá lugar en unos días en Madrid.

El libro, de solamente 104 páginas, va encabezado con una dedicatoria: "A Su Excelencia el Jefe del Estado Francisco Franco Bahamonde, Caudillo de España, como recuerdo de su visita triunfal a Barcelona". Esas palabras hacen pensar que este volumen, que fue propiedad del mismo Franco, debe haber salido de quien es heredero del personaje. Lo que está claro es que los papeles de un jefe de Estado, como es el caso, están increíblemente en manos privadas y se ofrecen al mejor postor, concretamente en la casa de subastas El Remate el próximo 20 de febrero con un precio de salida de 4.500 euros.

El álbum, encuadernado en piel con el escudo preconstitucional, contiene 137 fotografías que se reparten entre 31 epígrafes según las distintas visitas o encuentros de la agenda. A este respecto destacan por el número de fotografías las tituladas “Llegada de S.E. el Jefe del Estado a Barcelona”, “”Llegada de Monseñor Tedeschini, nuncio de S.S.”; “Homenaje del Frente de Juventudes al Caudillo”, “Inauguración del monumento al tambor del Bruch”, “Visita al fábrica de automóviles Fiat”; “Los restos de los Reyes de Aragón llegan a Poblet”.

En la última hoja impreso: “Este álbum ha sido dirigido y realizado en los talleres gráficos Agustín Núñez, con la colaboración del dibujante J. Mateu, y encuadernación Brugalla”. Este último es Emili Brugalla, uno de los más prestigiosos encuadernadores de todos los tiempos. En 1952, cuando recibió el encargo, ya era uno de los grandes maestros de su oficio, con algunos reconocimientos a sus espaldas.