Así es la ruta de las cascadas en el corazón de Pontevedra que no te puedes perder

En la comarca de Caldas, al norte de la provincia de Pontevedra, se encuentra una de las rutas más interesantes para los amantes del senderismo: las Fervenzas de Raxoi y Parafita. Este recorrido fluvial ofrece una combinación de paisajes naturales y patrimonio que atrae a numerosos visitantes cada año.

El acceso se realiza por la carretera N-550, que conecta Valga con Caldas de Reis. Al llegar a O Pino, se toma un desvío hacia Raxoi, donde comienza la ruta. El recorrido inicial es de unos 500 metros a pie, entre un espeso bosque de ribera, hasta llegar al río Valga, donde ya se encuentran los primeros molinos restaurados. A partir de allí, una pasarela de madera permite continuar el recorrido a lo largo del cauce fluvial.

El río Valga, en su trayecto por un cañón estrecho, forma varios saltos de agua, el más destacado de unos 10 metros de altura. Este primer salto crea una piscina natural, ideal para un baño en los meses más cálidos. Unas escaleras de madera permiten llegar al siguiente salto de agua, de aproximadamente 6 metros, completando el recorrido de cascadas de esta ruta.

Además de su belleza natural, la ruta también permite conocer parte del patrimonio industrial de la zona. A lo largo del sendero se encuentran varios molinos hidráulicos restaurados, que ofrecen una muestra del pasado agrícola e industrial del lugar. Las pasarelas de madera, instaladas para facilitar el acceso, hacen que el recorrido sea cómodo y seguro para los visitantes, aunque en época de lluvias las crecidas del río pueden afectar el paso en algunas zonas.

La ruta, de aproximadamente un kilómetro de distancia, es de fácil acceso y presenta poca dificultad, lo que la convierte en una opción ideal para cualquier tipo de público. Los saltos de agua, las pozas y el entorno natural convierten este lugar en un destino perfecto para una jornada de senderismo tranquila y agradable.