Trabajo

Los inspectores de Trabajo se rebelan contra Yolanda Díaz: "No estamos para campañas de acoso a empresas"

Denuncian que la ministra utiliza la Inspección como un "pseudo" brazo armado amenazante y sancionador contra las empresas. "Somos un servicio público. Tenemos autonomía técnica y funcional". Critican que ni siquiera se ha reforzado la plantilla de la delegación de Valencia

La vicepresidenta segunda del Gobierno de España, Yolanda Díaz, durante un encuentro con la presidenta de Navarra, María Chivite, en el Palacio del Gobierno de Navarra, a 14 de junio de 2024, en Pamplona, Navarra (España). Yolanda Díaz ha mantenido una reunión con la presidenta de Navarra durante su visita a Pamplona. Posteriormente, asiste a un encuentro con jóvenes del programa Kideak. 14 JUNIO 2024;YOLANDA DÍAZ;PAMPLONA;NAVARRA Eduardo Sanz / Europa Press 14/06/2024
Yolanda Díaz, ministra de TrabajoEduardo SanzEuropa Press

La Inspección de Trabajo vuelve a revolverse contra Yolanda Díaz por utilizar de nuevo el organismo para sus fines políticos. "Dejen actuar a este Servicio Público con la imparcialidad, objetividad e igualdad de trato y no discriminación en el ejercicio de la función inspectora que nos garantiza nuestra Ley Ordenadora, siempre en aras a velar por los intereses públicos y la vigilancia del cumplimiento de las normas del orden social", ha señalado con contundencia el Sindicato de Inspectores de Trabajo y Seguridad Social (SITSS), que ha cargado con dureza contra la ministra por convertir a la delegación inspectora de Valencia en un "pseudo" brazo armado contra los empresarios.

En el peor momento de la post DANA, Díaz advirtió en tono amenazante contra empresarios y autónomos que "estoy haciendo un seguimiento diario de las empresas que no están cumpliendo la legalidad vigente", enarbolando la bandera de los derechos de los trabajadores y dando por supuesto que las empresas iban a incumplir la ley, desprotegiendo a sus empleados. "La Inspección de Trabajo sabe exactamente qué empresas están cumpliendo y cuáles no. Quiero mandar un mensaje alto y claro de que se trata de mantener los puestos de trabajo, no se puede despedir a nadie", reiteró, para después volver a amenazar con duras sanciones económicas. "Las empresas que no garanticen la seguridad de sus trabajadores serán perseguidas y sancionadas por la Inspección", aseveró.

Por ello, los inspectores del SITSS han querido hacer constar que el organismo es un servicio público al que sólo le corresponde ejercer "la vigilancia del cumplimiento de las normas del orden social y exigir las responsabilidades pertinentes, así como el asesoramiento y, en su caso, conciliación, mediación y arbitraje en dichas materias, lo que efectúa de conformidad con los principios del Estado social y democrático de Derecho que consagra la Constitución Española, y con los Convenios número 81 y 129 de la Organización Internacional del Trabajo". Fuentes del sindicato han expresado su disconformidad con las formas de la ministra de Trabajo, que se repiten de forma recurrente. "Estamos cansados de esta situación y de que utilice la inspección en estos términos, criminalizando de forma generalizada a las empresas".

Denuncian también que la institución inspectora no está para liderar persecuciones contra las empresas. "Nosotros no estamos para hacer ninguna campaña de acoso contra las empresas, que bastante mal lo están pasando, ni seguimos instrucciones políticas de ningún tipo. Tenemos autonomía técnica y funcional, aplicamos la legislación vigente, no estamos solo para ir a sancionar, estamos para orientar, para advertir o para requerir información por si existe alguna irregularidad que se subsane. La sanción es el último recurso".

Asimismo, reclaman que en vez de situar a la Inspección en una difícil situación ante las empresas, lo que debería hacer Yolanda Díaz es "reforzar el servicio en Valencia, que está haciendo un enorme sobreesfuerzo sin que hayan llegado refuerzos a la plantilla, una situación de falta de efectivos ya recurrente en muchas delegaciones y que se ha agravado ahora en Valencia".

En las últimas semanas, Díaz ha alimentando también otra campaña de amenazas a las empresas sobre el registro horario. En una sesión de control en el Congreso señaló que su incumplimiento conllevará "sanciones disuasorias e individualizadas", levantando otro halo de sospechas sobre los empresarios al afirmar que las horas extra impagadas y el tiempo de trabajo "son una de las mayores irregularidades que padece el mercado laboral español", razón por la que ha justificado la presentación a los agentes sociales de la rebaja de la reducción de la jornada laboral, la mejora del registro horario y el endurecimiento de las sanciones -lo que se denomina ya una segunda reforma laboral-, que pasarán a ser individuales (por trabajador, no por empresa) con el objetivo de que "resulten realmente disuasorias". Por ello, incidió en Inspección de Trabajo redoblará sus esfuerzos para investigar el cumplimiento del control horario en remoto, la reducción de la jornada y el control horario en las jornadas especiales.