Balance anual

Valencia rompe la tendencia y registra un descenso del 4,5% de la criminalidad en 2024

Los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones, que es el delito en el que se encuadran los alunizajes, cayeron un 11,1 %

Agente de la Policía Local de València
Agente de la Policía Local de ValènciaPOLICÍA LOCAL DE VALÈNCIAPOLICÍA LOCAL DE VALÈNCIA

La ciudad de Valencia rompe con la tendencia alcista registrada en los últimos años en los datos de infracciones penales y de criminalidad convencional, según se desprende de los datos publicados por el Ministerio del Interior en relación con el balance de criminalidad del último trimestre del año 2024. Según este balance, València registró en los 12 meses de 2024 un descenso general de la criminalidad del 4,5 % con respecto al mismo periodo de tiempo del año 2023.

La apuesta del actual gobierno de Catalá por mejorar la seguridad en la ciudad ha conseguido romper la tendencia alcista con incrementos que llegaron a ser de un aumento de la delincuencia en la ciudad de entre el 34 % y el 15% en los mandatos anteriores.

El balance general de criminalidad convencional de 2023 se cerró en València con un incremento del 0,2% frente a 2022, y el de 2022 con una subida del 15 % frente a 2021. Por tanto, los datos del año 2024, con un bajada del 4,5 %, suponen una ruptura del ascenso de los delitos cometidos en la ciudad en los últimos cuatro años.

Mientras que la criminalidad convencional en toda España disminuyó un 0,1%, según el balance de criminalidad, en la ciudad de València disminuyó un 4,5%. Y por lo que respecta a los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones, que es el delito en el que se encuadran los alunizajes, en la ciudad de València disminuyó un 11,1 %. También han bajado un 6,5 % los hurtos.

Al respecto, el concejal de Policía Local, Jesús Carbonell, ha asegurado que “se ha conseguido romper con una tendencia preocupante en los últimos años, y se ha hecho gracias al trabajo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y a la implementación de medidas preventivas como la instalación de cámaras o la puesta en marcha de la nueva unidad USAP con mayor presencia policial”.

No obstante, Carbonell ha manifestado que hay que valorar estos datos con “cautela”, porque “la delincuencia es muy cambiante y hay que estar continuamente prevenido y actualizando los recursos personales y técnicos de la profesionales de la seguridad”.

En este sentido, ha destacado que “el Ayuntamiento de València ha acometido una ampliación de la plantilla de la Policía Local con 207 nuevos agentes de los cuales una cuarta parte ya están en pleno servicio y el resto lo hará próximamente y se han aumentado las inversiones destinadas a seguridad ciudadana en un 56,6 %, con inversiones como 2,1 millones para la instalación de nuevas cámaras de seguridad, así como la adquisición de equipamientos y vehículos, además de la dotación presupuestaria para la construcción de una nueva comisaría de Policía Local en Malilla”.

Además, medidas como el nuevo protocolo de horarios, que va a permitir mayor presencia policial los fines de semana, pueden contribuir a dar continuidad a los buenos datos, explica Carbonell. En cuanto a la policía de barrio, Carbonell ha respondido a la oposición que “se trata de una modalidad que fue aplicada por primera vez por el Partido Popular y que en los años de gobierno del Rialto vio mermados sus efectivos hasta desaparecer en muchos de ellos”.

Por último, ha recordado en cuanto a las cámaras de seguridad que los anteriores gobiernos de izquierda no estaban a favor de las mismas durante sus dos mandatos, “por lo que nos congratulamos de su cambio de posición, ya que se trata de una medida impulsada por el gobierno de la alcaldesa María José Catalá cuya implantación será progresiva”.