Los reumatólogos advierten de las consecuencias irreversibles del retraso en el diagnóstico

Uno de cada cuatro adultos sufre una enfermedad reumática en España, lo que supone unos 11 millones de personas; una cifra que podría incrementarse en los próximos años dado el envejecimiento poblacional.

Ahora bien, aunque estas patologías se asocian a la edad, lo cierto es que muchas patologías reumáticas, como las autoinmunes sistémicas, debutan en personas jóvenes, con el consiguiente gasto que puede suponer para el sistema sanitario dada su cronicidad.

Y, sin embargo, sigue demorándose su diagnóstico, tal y como advirtieron los expertos durante la celebración del 10º Simposio de Enfermedades Autoinmunes Sistémicas de la Sociedad Española de Reumatología (SER) que se celebra hasta mañana sábado en Santander.

"Todavía existe un retraso en el diagnóstico de algunas enfermedades autoinmunes sistémicas como el lupus, la esclerodermia o las miopatías, ya que muchos de estos trastornos presentan síntomas inespecíficos y similares a los de otras enfermedades, lo que dificulta su identificación temprana", afirma el Dr. Ricardo Blanco, jefe de Servicio de Reumatología del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, vicepresidente de la SER y miembro del Comité Organizador Local del simposio.

Así, los pacientes, como explica el doctor, refieren fotosensibilidad, cansancio, dicen que los dedos de las manos con el frío se les ponen blancos o morados, que son síntomas inespecíficos para múltiples patologías.

"Se trata de enfermedades complejas que afectan a medio millón de personas en nuestro país y que pueden dañar cualquier órgano. De ahí la importancia de un diagnóstico temprano porque, de media, se pueden tardar cuatro, ocho meses en su diagnóstico" y aunque pueda parecer poco, lo cierto es que puede tener consecuencias muy graves si por ejemplo" el paciente tiene afectado el riñón", precisa el Dr. Marcos Paulino, presidente de la Sociedad Española de Reumatología (SER) y jefe del Servicio de Reumatología del Hospital General de Ciudad Real.

Pero al igual que resulta fundamental garantizar un diagnóstico lo antes posible, también es importante fomentar "un tratamiento integral multidisciplinar para mejorar su manejo y pronóstico", incide el doctor Blanco.

Y es que pese al retraso inicial, una vez que se sospecha de que podría tratarse de una enfermedad autoinmune sistémica, "disponemos de los test de inmunología para su correcto diagnóstico y se están investigando en biomarcadores para un diagnóstico más precoz, y hay diferentes fármacos en desarrollo", explica Blanco.

Ahora bien, es importante que "todos esos avances sean accesibles a la población y que independientemente de su Código Postal, los pacientes tengan un acceso rápido al especialista de Reumatología", incidió el doctor Paulino. Por eso, resulta fundamental "mejorar la coordinación con atención primaria".

La esperanza, en todo caso, está puesta en la terapia CAR-T para el lupus: "En Alemania y otros países se ha dado este tratamiento, y los pacientes más refractarios se curan, y se encuentran en la actualidad sin tratamiento y con la enfermedad totalmente curada. Habrá que ver más a largo plazo y con más pacientes, pero es un hito", destaca el doctor Blanco.

"En el Hospital de Valdecilla tenemos seis ensayos con CAR-T para lupus y también para esclerodermia y miopatías", destaca el doctor Blanco, que a preguntas de los periodistas afirmó que también disponen de investigaciones para patologías reumáticas autoinmunes en Barcelona, Madrid y Salamanca.

"La terapia CAR-T es el futuro pero todavía van a pasar unos años para su implantación" porque si bien se vislumbra como una terapia que puede curar, lo cierto "es que se trata de un procedimiento complicado", recuerda el presidente de la SER.