Pensiones

Plan de jubilación y de pensiones: estas son las principales diferencias

Uno de los principales beneficios fiscales de los planes de pensiones es que el contribuyente podrá obtener deducciones en la declaración de la Renta

Las pensiones en España han visto una serie de reformas y aumentos significativos en 2024 que ya están cambiando la vida de millones de pensionistas y jubilados
Jubilados paseando por la playaDreamstime

Jubilarse es el sueño de muchos trabajadores. No obstante, cuando se pone punto y final a la vida laboral, una de las principales preocupaciones de estas personas es recibir una pensión insuficiente que no les permita vivir sus años dorados de una forma cómoda y financieramente estable. Tanto es así, que siete de cada diez españoles considera que la prestación económica que recibirán por parte de la Seguridad Social será insuficiente. Es por ello, que muchos deberán complementar esta pensión pública con ahorros que pueden generarse a través de diferentes maneras como los planes de jubilación y los de pensiones.

A pesar de que ambos planes tienen el mismo objetivo final, son productos de naturaleza diferente. "Un plan de jubilación es un seguro que, de hecho, suele gestionarse a través de compañías aseguradoras. El Seguro Individual de Ahorro a Largo Plazo (SIALP) y el Plan Individual de Ahorro Sistemático (PIAS) son algunos de los formatos más frecuentes de planes de jubilación. Por su parte, un plan de pensiones es un producto financiero de ahorro al que vamos aportando capital que, una vez dado el paso a la jubilación, podemos recuperar", explica el blog del Banco Santander.

Disponibilidad del capital

La disponibilidad del capital es otra de las diferencias entre ambos planes, en el caso del de jubilación, el capital invertido se podrá rescatar en cualquier momento, siempre y cuando se cumplan las condiciones firmadas. Además, si se necesita disponer del dinero de forma urgente, esta persona deberá asumir una penalización económica.

En cambio, en el plan de pensiones, por norma general, solo se podrá optar por el rescate del capital una vez se accede a la jubilación. Sin embargo, en el contrato suelen establecerse una serie de excepciones entre el interesado y la entidad como situaciones de desempleo, riesgo de desahucio, fallecimiento o enfermedad grave. Además, también existe la posibilidad de, a partir de 2025, solicitar el reembolso de aquellas participaciones que tengan una antigüedad mínima de 10 años.

Fiscalidad de las aportaciones

La Administración suele incentivar las aportaciones de los ciudadanos a los planes de pensiones para favorecer el ahorro de cara a la jubilación. Uno de los principales beneficios fiscales de estos planes es que el contribuyente podrá obtener deducciones en la declaración de la Renta. En la última campaña, la aportación individual máxima a planes de pensiones que se podía deducir el contribuyente era de 1.500 euros. No obstante, en el momento del rescate, las cuantías que se reciban de un plan de pensiones serán consideradas como rendimientos del trabajo y aumentarán la base imponible del IRPF.

Los planes de jubilación no suelen tener deducciones fiscales en las aportaciones por su naturaleza, sin embargo, recibirán ventajas en el momento del rescate. "Es habitual que se tribute únicamente por los rendimientos obtenidos. Para algunos tipos de planes de jubilación, como los SIALP, incluso los rendimientos podrán estar exentos de tributación en el IRPF, si se cumplen ciertas condiciones", asevera la entidad financiera.

Rentabilidad

La entidad bancaria asegura que, por norma general, los planes de jubilación suelen tener una rentabilidad "menor, fija y garantizada" al ser un producto más conservador. En cambio, los planes de pensiones suelen tener una mayor rentabilidad y también un mayor riesgo.