La deuda externa bruta de España cerró 2024 con el récord de 2,59 billones de euros

La posición de inversión internacional (PII) de España -medida como la diferencia entre la inversión española en el exterior y la procedente de fuera- cerró 2024 en 700.500 millones de euros, equivalentes al 44% del PIB, más de siete puntos por debajo de la de 2023 (51,3% del PIB), que se traducen en 51.136 millones menos. Así lo constata el último informe del Banco de España, que incluye todos los "compromisos de pago que la economía española tiene con el exterior" -correspondientes a la deuda pública o los préstamos con entidades extranjeras, entre otros- y que conforman la deuda externa bruta.

El supervisor estima que esta deuda externa bruta en el cuarto trimestre se situó en el récord de 2,59 billones de euros, un 163,1% del PIB, frente a los 2,57 billones de euros del trimestre anterior -que suponía un mayor porcentaje sobre el PIB, 164,3%, al haber crecido menos la economía- y a los 2,452 billones del cuarto trimestre de 2023 (163,6% del PIB). El informe publicado por el Banco de España refleja también que, excluyendo el Banco de España y la deuda registrada entre empresas con una relación de inversión directa, la deuda externa disminuyó en las administraciones públicas (pasando de 728.000 millones a 714.000 millones) y aumentó en las instituciones financieras monetarias (donde pasó de 635.000 millones a 665.000 millones) y en los otros sectores residentes (de 294.000 millones a 306.000 millones).

Por su parte, la capacidad de financiación de la economía española, alcanzó a cierre de 2024 un récord desde 1993, hasta los 66.600 millones (4,2% del PIB), por encima de los 56.000 millones de 2023 (3,7% del PIB). El regulador bancario ya adelantó en febrero que España logró en 2024 el duodécimo año consecutivo con superávit por cuenta corriente tras registrar un saldo positivo de 48.378 millones de euros, un 21,6 % superior al de un año antes. Solo en el cuarto trimestre del año pasado, los datos del Banco de España reflejan una reducción del superávit por cuenta corriente de 200 millones, hasta un total de 8.600 millones de euros. La capacidad de financiación de economía, no obstante, creció hasta los 9.100 millones de euros, un 15,2% más.

En cuanto al superávit de la cuenta corriente nacional, esta alcanzó los 48.100 millones de euros en año 2024, lo que supone un aumento del 21% respecto a los 39.800 millones registrados un año antes, gracias al tirón de los ingresos por turismo, que hizo despegar de nuevo el superávit del sector servicios superó, que de largo el pasado ejercicio los 100.000 millones de euros, frente a los 93.500 millones registrados un año antes, de nuevo gracias a la mejora turística, que que aportó 68.300 millones al superávit, frente a un saldo de 58.800 millones del mismo periodo de 2023.

El déficit de la balanza de bienes se redujo hasta situarse en 32.300 millones, 2.300 millones menos que un año antes. La renta primaria registró un saldo negativo de 8.100 millones en 2024, frente a los 7.200 millones del 2023; mientras que el déficit de la renta secundaria se mantuvo en los 11.800 millones de euros. Finalmente, la cuenta de capital arrojó un superávit de 18.500 millones en a cierre del año 2024, un 14,2% superior respecto a los 16.200 millones de 2023.