Historia

La barroca y espectacular Semana Santa Marinera de Valencia contada a los no valencianos

El periodista y doctor en Teología, Baltasar Bueno, presenta un libro con las costumbres de esta festividad

Miembros de las distintas cofradías y público se mezclan en Viernes Santo durante la procesión a la playa de la Semana Santa Marinera para honrar a los muertos en el mar. Imagen de archivo.
Miembros de las distintas cofradías y público se mezclan en Viernes Santo durante la procesión a la playa de la Semana Santa Marinera para honrar a los muertos en el mar. Imagen de archivo.larazon

La prestigiosa editorial Almuzara, en su colección destinada a las grandes devociones populares españolas, dirigida por Rosa García Perea publica un nuevo libro del periodista y doctor en Teología Baltasar Bueno, «Semana Santa en Valencia». Un trabajo que trata de las celebraciones y costumbres de Semana Santa en Valencia a lo largo de la historia, hoy algunas desaparecidas o casi en el olvido, incidiendo especialmente en la Semana Santa Marinera del Grau, Canyamelar y Cabanyal, con fotografías de Pedro Molero. El libro será presentado el viernes 28 de marzo en Librería Paulinas de plaza de la Reina y el miércoles 2 de abril en el Museo de la Semana Santa Marinera.

«El libro busca la aproximación a lo que debió ser la Semana Santa de Valencia, hoy desaparecida y que termina sumergiéndose en lo que en la actualidad es la Semana Santa Marinera», explica Baltasar Bueno. «En este trabajo queda patente nuestra peculiar antropología mediterránea, barroca y festiva, muy distinta a otras Semanas Santas de España y del mundo, muy especial donde a Jesús lo hacemos desfilar tras su Resurrección a ritmo de pasodoble».

El libro es un encargo de la editorial Almuzara, que ha publicado en una de sus colecciones todas las Semanas Santas de Andalucía y ha apostado por difundir también la valenciana. «Esto significa que la Semana Santa Marinera trascenderá las fronteras locales, regionales y hasta nacionales, pues Almuzara está implantada también en Améria Latina».

Bueno afirma que ha escrito un libro fácil de leer. «No es una tesis doctoral, ni un libro estantería. Se puede leer de un tirón en cuatro horas. Divulga, cuenta, difunde cómo es nuestra Semana Santa, muy plástica, fílmica, expresiva, viviente».

Insiste además que en Valencia se celebra la Pasión y Muerte de Jesús, «a lo vivo, teatralmente, al menos desde el siglo XVIII, así lo están haciendo en nuestros poblados marineros».

El prólogo corre a cargo de José Aguilar García, «un buen amigo, pintor e ilustrador, que conoce muy bien la Semana Santa Marinera, discípulo del cartelista Rafa Contreras, que tiene un libro sobre el arte del cartel semana santero. La belleza plástica de la Semana Santa Marinera está resaltada más aún por las fotografías de Pedro Molero, el fotógrafo de las tradiciones valencianas y especialmente, de la Semana Santa Marinera, cuya contribución agradezco muchísimo».

«Semana Santa en Valencia» alude a los 100 años que hace ahora del viaje a Sevilla de un grupo de agentes de aduanas de Valencia, de donde surgió la idea de impulsar una Semana Santa de los pueblos del Grau, Cabanyal y Canyamelar, a partir de constituirse ellos mismos en la Hermandad de la Santa Faz».

Bueno destaca que la Semana Santa en Valencia está «creada, parida, vivida y mantenida por gentes de la mar, marineros, pescadores, portuarios, naturales y vecinos de los barrios marineros de la ciudad, pueblos de pescadores, avezados a luchar en el mar». Explica además que esta es la única Semana Santa que tiene Valencia, «la tuvo, fueron solemnes sus cuatro grandes procesiones penitenciales, pero decayeron y desaparecieron. La ciudad, su corazón histórico, renunció a ella. Afortunadamente, la fe de nuestras gentes de la mar en nuestra ciudad anclan en dos Cristos marineros, el del Grau (1249) y el del Salvador (1250), llegados por mar a esta ciudad, según piadosa tradición, y esta solera o poso devocional macerada con el paso de los siglos indudablemente está en la base originaria de la actual Semana Santa Marinera».

Su historia está limitada a un siglo atrás. «Un sacerdote valenciano que tenemos en Roma, monseñor José Jaime Brosel, rector de la Iglesia Española, encontró una publicación dando cuenta de que en 1794 ya se hacía procesiones de Semana Santa en el Grao muy parecidas a las de la Semana Santa Marinera, por ello hay que revisar la historia en cuanto a sus orígenes, precedentes y antecedentes históricos».

El periodista y doctor en Teología remarca que Jesús, «con unos pocos pescadores y marineros, Jesús hizo la gran revolución cultural y religiosa del cristianismo. Hoy las cifras estadísticas oficiales hablan de 2.400 millones de cristianos bautizados en el mundo, una de cada tres personas del mundo está considerada cristiana, al menos en las estadísticas. Y curioso también es que la Semana Santa Marinera surja con fuerza en la Valencia republicana y de izquierdas de los años 20 del siglo XX».

Bueno hace referencia a que durante la dominación árabe de la ciudad, tiempos de dificultad para los cristianos, a los mozárabes se les permitía celebrar públicamente procesiones de Semana Santa. Los musulmanes han respetado y venerado siempre los enterramientos de los santones y por ende respetaron la capilla del Santo Sepulcro, templo cristiano intramuros de la Valencia islámica, que los cristianos tenían dedicado al memorial de la Pasión y muerte de Jesús. Como respetaron la basílica sepulcral del gran mártir del primitivo cristianismo el joven diácono san Vicente mártir, la Roqueta. En ambos lugares se permitió a la minoría cristiana, los mozárabes, desarrollar sus cultos y devociones".

El Santo Cáliz y San Vicente Ferrer

En el libro se cuenta también como en el siglo XV, la relación de Valencia con las celebraciones de la muerte y pasión de Jesús se estrechan más por el Santo Cáliz de la última cena del Señor. "Desde entonces está depositado, custodiado y venerado en la Catedral de Valencia. Y aquí en Valencia, y luego por todo el territorio peninsular, san Vicente Ferrer promueve la devoción a la Sangre de Cristo e impulsa la creación de escuelas de penitentes, corporaciones y cofradías de las que tomarían razón y ejemplo las cofradías de disciplinantes y de Semana Santa. Tenemos testimonios vivos de cómo celebrábamos antaño la Semana Santa antaño en la solemnísima y masiva procesión de la Purísima Sangre de Sagunto, la Visitatio Sepulchri de Gandía, el Desenclavament de Oliva o las sargas cuaresmales de Cheste.

Por tanto, Bueno sitúa también a San Vicente Ferrer como clave en la Semana Santa Marinera. "Es ideador de las escuelas, cofradías y corporaciones de penitentes, precedente histórico de las cofradías de Semana Santa actuales en España y parte de la Europa donde predicó. Él mismo fue creador y prior de la Concordia dels Disciplinats del Grau de Valencia. Está en el origen inspirador de las más antiguas Cofradías de Semana Santa. En Valencia está documentado que san Vicente Ferrer tuvo que ver con la organización de procesiones de Semana Santa".