Preocupación

Camilo Blanes Ornelas, la última oportunidad de una víctima de sí mismo

Tras mes y medio en la UCI, tendrá daños neuronales aún no evaluados

Camilo Michel Blanes, hijo de Camilo Sesto
Camilo Michel Blanes, hijo de Camilo SestoUATGTRES

Camilo Blanes Ornelas acaba de volver de la muerte. No era la primera vez que la desafiaba. Ojalá sea la última. Las impactantes imágenes del joven tras recibir el alta hospitalaria el 26 de enero son solo un atisbo de lo vivido y sufrido durante los más de dos meses de ingreso en el Hospital Puerta de Hierro.

Camilín había dejado de tomar, voluntariamente, la medicación que recibía por una enfermedad crónica que padece. Descuidó el tratamiento farmacológico necesario y eso le provocó una bajada de defensas en su organismo. La delirante celebración de su 38 cumpleaños durante dos días de desenfreno acabó en un accidente de bici que le dejó durante horas a la intemperie.La debilidad de su frágil sistema inmunitario, los dos días de suicida fiesta y el frío derivaron en un cuadro catastrófico agravado por una neumonía severa, insuficiencia renal, por la que precisó hemodiálisis y una histoplasmosis por sus problemas pulmonares agravados por las horas bajo la lluvia. Camilo Blanes ingresó de urgencia el 23 de noviembre del pasado año con shock séptico, insuficiencia respiratoria aguda con ambos pulmones afectados, insuficiencia renal aguda, acidosis metabólica y con delirios por encefalopatía por afección fúngica. Los médicos que le han atendido han obrado un auténtico milagro. El joven se ha debatido durante más de un mes entre la vida y la muerte. El hijo de Camilo Sesto tuvo que ser intervenido de urgencia con una «traqueostomía» de la que aún se recupera. Tras mes y medio en la en la UCI, pasó a planta el 7 de enero del presente año. Tan solo pesaba 40,5 kilos… El joven arrastrará daños neuronales aún no evaluados.

Camilo Sesto, junto a su único hijo, Camilo Blanes, en una foto compartida por éste en su Instagram
Camilo Sesto, junto a su único hijo, Camilo Blanes, en una foto compartida por éste en su Instagramlarazon

Aislado de falsas amistades

Lo que más preocupó es que, al salir del coma, nada más recuperar la consciencia y cuando pudo empezar a deambular por la habitación, Camilo tuvo una reacción tan preocupante que arrastró a su madre a tomar la decisión de intentar protegerle de sí mismo. Lourdes Ornelas y la novia del joven, María, no se han separado ni un momento del hospital en el que ha permanecido ingresado. Ambas hicieron causa común, le han aislado de malas y falsas amistades y han sabido filtrar con delicado cuidado los contactos con los familiares, lo que acarreó cierta crítica a la madre del joven. El tiempo y las circunstancias dan la razón a Lourdes. Camilín quería salir a la calle para retomar su desenfrenada existencia. La peligrosa vida del hijo de Camilo Sesto en los últimos meses, antes del dramático desenlace de su fiesta de cumpleaños ya desesperaba a su madre que se afanaba por sacarle del abismo en el que había ingresado. Se rodeaba de personas tóxicas que deambulaban en la espléndida mansión heredada por el joven. Los continuos escándalos de fiestas sin fin y los antecedentes del propio joven, pusilánime, influenciable y con difícil actitud para la responsabilidad, habían alertado a su madre que intentó a la desesperada reconducir la vida de su hijo. Camilo era mayor de edad, la madre sentía desesperada impotencia para frenar la previsible consecuencia de esa vida, más cercana al averno que a la gloria de la fortuna heredada. Ornelas valora solicitar la inhabilitación judicial de su hijo. Sería la última y responsable oportunidad para salvarle. Los informes médicos, las sugerencias de facultativos de psiquiatría y los antecedentes le otorgan la posibilidad de proteger a su hijo de sí mismo y conseguir una vida tranquila y no dilapidar su herencia.

Camilín es la triste consecuencia de una vida que no ha sido fácil. Lourdes Ornelas sufrió con amarga tristeza la lejanía de su hijo. Camilo Sesto presionó y manipuló a la madre para que le dejase viajar a Miami con el pequeño y recibir una formación escolar lejos de las posibilidades de una mujer humilde. Lourdes se sacrificó y firmó un acuerdo que pensó que sería beneficioso para el niño. Sin embargo, como otros hijos de grandes artistas, vivió bajo el mismo techo que el padre sufriendo una triste soledad y el fuerte y caprichoso carácter de Sesto. Las desavenencias entre ellos crecieron al llegar la adolescencia. Camilín entró en un bucle de fiestas y desenfreno del que aún no ha salido. Protagonizó algunos escabrosos capítulos de escándalos de los que el padre tuvo que librarle. Personas cercanas al cantante cuentan que, harto de los problemas que creaba el joven, hicieron que el artista se asesorase e iniciase los trámites para desheredarle. Al parecer, el cantante ideó, organizó y forzó una fuerte discusión para incitar a su hijo a agredirle. La discusión fue grabada y pretendía ser aportada como prueba para que no heredase la fortuna. Finalmente no lo desheredó.