Viajes
Comportamientos que debes evitar si viajas a Barcelona: tu seguridad está en riesgo
Cada ciudad y región española tiene sus 'leyes no escritas' que debemos conocer y respetar para evitar inconvenientes
Con la llegada del verano, surgen los planes y viajes a ciudades y lugares desconocidos. Cuando viajamos al extranjero, solemos investigar sobre el destino, su gastronomía, los puntos de interés y la seguridad. Sin embargo, en viajes nacionales, tendemos a ser más relajados y apenas buscamos información sobre el lugar. Esto es un gran error. Aunque estemos en nuestro propio país, cada ciudad y región tiene sus 'leyes no escritas' que debemos conocer y respetar para evitar problemas, especialmente en destinos turísticos donde los locales pueden estar muy saturados de comportamientos incívicos o inapropiados.
Aquello que no debes hacer si viajas a Barcelona
En el contexto anteriormente descrito, es crucial tener en cuenta ciertos aspectos para disfrutar del viaje sin inconvenientes.
Comportamiento en el transporte público
En primer lugar, es fundamental cómo te comportas en el transporte público, especialmente en el metro. Además de pagar los billetes y ser respetuoso con el mobiliario y los demás pasajeros, hay algo muy importante que puede evitarte enfrentamientos innecesarios. Se trata del lugar que ocupas en las escaleras mecánicas. Si eres de ciudad con metro es muy probable que sepas de lo que hablo, aunque no está de más recordarlo.
Sin embargo, hay personas que desconocen la "organización" en las escaleras mecánicas. En ellas, siempre se debe permanecer a la derecha si te quedas parado durante el trayecto, dejando la izquierda libre para quienes tienen prisa y prefieren subir más rápido. Así se evitan congestiones y aquellos que van con prisa pueden avanzar sin tener que detenerse.
Cuidado con los restaurantes y bares de las zonas céntricas
En segundo lugar, no comas en lugares céntricos como La Rambla o el Paseo de Gracia sin haber consultado previamente las reseñas del lugar. Aunque esto es 'de primero de viajero', muchas veces, debido al calor o el cansancio, terminamos cayendo en el bar más cercano y después nos arrepentimos. En estas zonas tan concurridas y turísticas, los precios suelen ser altos y la calidad, a menudo, deja mucho que desear.
Evita los taxis
Si viajas con un presupuesto ajustado y quieres ahorrar dinero, evita coger taxis. En su lugar, aunque pueda ser menos cómodo, utiliza el transporte público o desplázate a pie, lo cual también es una buena forma de conocer la ciudad.
No pierdas tu tarjeta de transporte público
No pierdas tu tarjeta o billete de transporte público. En la ciudad catalana, los revisores de tren son muy habituales. En caso de que pidan tu pasaje y no lo tengas, las multas ascenderán a los 100 euros.
No visites la playa de la Barceloneta en pleno verano
La recomendación de todo local es no visitar esta playa. Durante los meses de verano está muy masificada, especialmente por turistas, a menudo, bebidos. En Barcelona hay playas muy bonitas y mucho menos concurridas que definitivamente merecen mucho más la pena.
No descuides tus pertenencias
España es un país generalmente seguro, pero la zona centro de Barcelona, en particular, puede ser más insegura debido a la presencia de carteristas, especialmente en el metro. Estos delincuentes son expertos en robar sin que te des cuenta, por lo que es importante estar siempre alerta, especialmente con tus objetos de valor y el dinero que lleves contigo.
Evita el tema político
Cuando viajes, es mejor evitar el tema político. En Cataluña, coexisten independentistas con personas que están en contra, y la situación ya es lo suficientemente tensa. Como visitante, es prudente no ofrecer opiniones sobre el conflicto para no causar problemas. No puedes saber a quién tienes enfrente ni cómo podría reaccionar, por lo que es más seguro mantenerte al margen de esas conversaciones.
Pide con educación que te hablen en castellano
Finalmente, evita los conflictos con las personas que solo se dirigen a ti en catalán. Aunque la inmensa mayoría de las personas te responderán en castellano si les hablas en ese idioma, hay quienes insistirán en hablar en catalán. En estos casos, lo mejor es pedir educadamente que cambien de idioma, explicando que no entiendes bien y que estás aprendiendo el idioma, pero aún no lo dominas por completo. Esto les suele agradar y facilita la comunicación.