Marines
La Armada quiere para la Infantería de Marina estos vehículos anfibios que BAE ha presentado en Madrid
"Cumple con las necesidades de la misión y los requisitos del programa de la Infantería de Marina Española", dijo el responsable del fabricante del ACV, que ya usan los Marines estadounidenses.
BAE Systems e Iveco Defence Vehicles (IDV) celebraron el debut internacional del Vehículo de Combate Anfibio (ACV) en la exposición internacional de defensa y seguridad Feindef que tuvo lugar la pasada semana en Madrid. La familia de vehículos ACV, desarrollada y entregada por la asociación estratégica entre BAE Systems e IDV, respalda la capacidad de movilidad expedicionaria del Cuerpo de Marines de los EE. UU. y es el único vehículo de combate verdaderamente anfibio en producción actual. El vehículo expuesto en Feindef es la variante personal (ACV-P), que es la plataforma base de la familia de vehículos.
“Esta es la primera vez que el vehículo de combate anfibio se muestra fuera de los Estados Unidos, y es un motivo de orgullo que esté aquí en España, un importante aliado a largo plazo de los Estados Unidos y la OTAN”, dijo Garrett Lacaillade, vicepresidente. de programas anfibios en BAE Systems. Ambas empresas aseguraron también que "se enorgullecen de presentar esta capacidad anfibia crítica de próxima generación que cumple con las necesidades de la misión y los requisitos del programa de la Infantería de Marina Española”, dijo Nazario Bianchini, jefe de ventas de IDV. "Juntos, estamos preparados para responder a cualquier solicitud de personalización internacional para asegurar el despliegue óptimo de los vehículos anfibios dentro del sistema de defensa español y europeo".
La plataforma anfibia fue diseñada para crecer y adaptarse a las necesidades de la misión, permitiendo espacio para nuevas capacidades a medida que evoluciona la tecnología, como reconocimiento, guerra electrónica, antiaérea e integración de sistemas de aeronaves no tripuladas. Con su diseño modular, el ACV está listo para brindar a los infantes de marina de todo el mundo la flexibilidad para abordar roles de misión adicionales e integrar tecnologías futuras.
El ACV-P es totalmente apto para mar abierto y puede transportar 13 infantes de marina cargados de combate, junto con una tripulación de tres, desde el barco hasta el objetivo y de regreso. La variante de comando y control ACV proporciona múltiples estaciones de trabajo para que los infantes de marina mantengan y administren la conciencia situacional en el espacio de batalla. La variante de recuperación ACV brinda soporte de campo, mantenimiento y recuperación directos a la familia de vehículos ACV. El ACV-30 monta un sistema de torreta remota estabilizado de calibre medio fabricado por Kongsberg que proporciona la letalidad y la protección que necesitan los infantes de marina al tiempo que deja un amplio espacio para la capacidad de las tropas y la carga útil.
En el punto de mira de la Armada
Ya el año pasado, la Armada española ha mostrada su interés en este vehículo anfibio como recambio, a medio plazo, de los actuales vehículos de asalto anfibio (AAV) y de los blindados de combate de la Infantería de Marina Piraña (VCI). Así lo expresaba en un artículo publicado el pasado año en la Revista General de Marina, el teniente coronel Miguel Hernández Suárez-Llanos, que hacía un análisis pormenorizado de las características del blindado de los Marines.
“La implantación del ACV como futuro VCI del batallón mecanizado de la Brigada de Infantería de Marina (Brimar) parece una solución muy razonable, tanto desde el punto de vista operativo como del logístico”, resalta el teniente coronel. El artículo parte de la premisa de que el retraso en la necesaria sustitución de los AAV, en la actualidad “congelada”, hace que este programa esté cada vez más cercano a “otro hito que será necesario en el medio plazo: la renovación de los vehículos de combate de Infantería (VCI) Piraña, que en 2028 comenzarán a cumplir el final de su ciclo de vida”. Y agrega: “Así, la cada vez mayor cercanía en el tiempo de ambas necesidades aconseja analizar la posibilidad de que sean atendidas de manera integral”.
Ventajas del ACV y necesidades
Hernández detallaba en dicho artículo que el ACV tiene una movilidad y maniobrabilidad (velocidad, autonomía y operación en pendiente) similar a la de otros VCI y una potencia relativamente elevada, sin exceder demasiado en peso y dimensiones, al tiempo que ofrece una “muy superior” capacidad de embarque de tropas, con 13 infantes frente a los ocho que alberga vehículos como el Piraña V. Asimismo, es una plataforma polivalente con una arquitectura de diseño abierta, capaz de llevar una torre de 30 mm para versiones de reconocimiento, como implementos de zapadores o actuar en operaciones ISR (Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento) junto con vehículos aéreos no tripulados.
"A falta de un estudio más detallado, un batallón de ACV con cuatro compañías de línea, una sección de reconocimiento, otra de zapadores, una de sanidad y los correspondientes elementos de mando, ISR (6) y recuperación, podría comprender entre 60 y 65 vehículos, lo cual no se aleja mucho de la suma de los 19 AAV y los 39 Piraña III actualmente en servicio, pero obteniendo una estructura orgánica homogénea y más completa”, decía el militar españo.l. E insiste en que la unificación de los dos programas redundará en “una mayor prioridad” y “una mayor eficiencia y ahorro en el largo plazo”.
Retorno industrial
También pone el foco en los posibles inconvenientes de este programa. Uno de ellos, “el escaso retorno industrial”, puesto que, apunta, el reducido número de unidades a adquirir difícilmente permitiría obtener “una solución nacional”. No obstante, el teniente coronel recuerda que el AVC de BAE Systems está basado en una plataforma de la empresa italiana Iveco, con instalaciones en España.
Por lo tanto, se podrían negociar -continúa- “la realización de algunas de las tareas de fabricación, ensamblaje y/o mantenimiento en centros e instalaciones de la propia Iveco en España”. Además, la unificación de las necesidades permitiría poner en marcha un programa de mayor envergadura “facilitando las negociaciones con las empresas implicadas”.
Entre 350 y 400 millones
El presupuesto podría rondar entre los 350 y 400 millones de euros, muy lejos aún del resto de los principales grandes programas de armamento. Este importe es una estimación, resultado de asignar un precio medio por vehículo de alrededor de seis millones de euros.
“El nuevo diseño del ACV sobre una plataforma 8x8 combina las funcionalidades como vector anfibio con las de una plataforma de combate de infantería, lo que supone una oportunidad para la Infantería de Marina, que podría acometer la resolución de dos necesidades críticas de manera integral en un único programa (reponiendo tanto los AAV como los VCI Piraña con los nuevos ACV)”, concluye a modo de resumen el autor.