Nutrición
Los efectos en el cerebro de comer pistachos todos los días
La riqueza intrínseca del pistacho aporta valores nutritivos saludables que contribuyen al desarrollo humano. Además, su ingesta diaria proporciona en el cuerpo unos efectos determinados a considerar
Al igual que el resto de frutos secos, el pistacho es uno de los más valiosos tanto por su riqueza nutricional como por su valía gastronómica. Su aplicación culinaria cada vez es más notoria, sobre todo en la alta cocina donde este alimento se está empezando a considerar como un bien sumamente preciado. De hecho es bastante frecuente encontrarlo en postres más sofisticados como tartas o galletas. Sin embargo, cuáles son las razones por las que está de moda este fruto. En primer lugar, su sabor y la variedad que ofrece resultan de real interés.
Del mismo modo que con la mayoría de frutos secos, dependiendo de la zona en la que crezca existen varios tipos de pistacho. El conocido y amado por todos recibe el nombre de Kerman, aunque otras variedades como la Napolitana, Santangilisi o Nazaret son muy populares. Se lleva cultivando en España desde la época romana pero tuvo su auge en la invasión árabe de la península. En 1980 se produjo su reintroducción en el mercado alcanzando una gran popularidad hasta nuestros días.
Por otro lado, sus características minerales son ricas en fósforo y potasio y como consecuencia directa de este hecho potencian las capacidades intelectuales y mejoran la salud mental. Asimismo contiene magnesio, hierro, calcio y zinc. Por lo que, en adición a esta combinación y la vitamina E influyen en la correcta salud del aparato reproductor. Además, con su alta tasa de vitamina A favorecen al cutis de la piel y previenen del envejecimiento.
¿Cuáles son los beneficios de comer pistachos?
Este alimento reduce el estrés debido al potasio y magnesio que tienen, favorecen al tránsito intestinal, son antioxidantes, gracias a su alto contenido en hierro favorecen el mantenimiento de los huesos y combaten la anemia, mejoran la salud cardiaca y el colesterol. Con motivo de esta lista de peculiaridades resulta ser uno de los frutos más provechosos de la naturaleza.
Al mismo tiempo existen varias evidencias de que el pistacho combate el insomnio ya que, con su alto contenido en melatonina, ayudan a conciliar el sueño. Por cada 30 gramos de pistacho, 6 de ellos son de esta sustancia. También mejora la vista y ayudan a prevenir dolores oculares. Por último, ayudan a reducir el riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares.
¿Qué sucede en mi cerebro si ingiero este alimento con mucha frecuencia?
Ningún alimento es bueno si se ingiere de manera abusiva, sin embargo, si se consigue controlar su consumo diario, este fruto puede ofrecer ciertas ventajas que ayudan al desarrollo tanto corporal como cerebral. Y, como se ha explicado con anterioridad, la clave de este suceso proviene de sus propiedades. El cerebro está compuesto en casi un 80% de luteína y zeaxantina.
Por lo que, la ingesta de pistacho, que contiene estos dos carotenoides, favorece la protección del mismo y afectan a la memoria aportando una mayor capacidad de retención. Igualmente, gracias a su contenido en antioxidantes flavonoides protegen al núcleo cerebral del deterioro cognitivo al reducir el deterioro celular y el hinchamiento.
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