Una nutricionista de Harvard alerta: el alimento presente en los desayunos que causa inflamación y provoca falta de energía

Todo el mundo sabe que el desayuno es la comida más importante del día o al menos eso nos han repetido a lo largo de nuestra vida. Esto se debe a que los primeros alimentos que ingerimos en el comienzo del día, tras un largo periodo de ayuno, son de vital importancia de cara a las primeras horas del mismo, aquellas donde llevamos a cabo una mayor actividad física y mental. Por tanto se podría afirmar que esta afirmación resulta verídica, al menos en cierto modo. Es por eso pertinente elegir una buena alimentación rica en nutrientes y grasas saludables.

Sin embargo, hay quienes desconocen las desventajas de algunos alimentos que han estado presente en las mesas de desayuno durante toda la vida. Por ejemplo, en el caso del desayuno americano, aquel compuesto por huevos y bacon más otras adiciones, contiene un índice calórico muy alto pero al mismo tiempo muy proteico. Por lo que, se puede llegar a recomendar para aquellos deportistas que excedan la quema de calorías o aquellos que vayan a realizar un gran esfuerzo físico. No obstante, el alimento que nos referimos hoy guarda bastante relación con los procesados.

La Doctora Uma Naidoo, directora de psiquiatría nutricional en Harvard, expuso en un artículo publicado en la CNBC la importancia de ser conscientes de los componentes nutritivos que hay detrás de los alimentos con los que rompemos el ayuno. Con motivo de la falsa concepción que tenemos de algunos productos que dan una imagen familiar, la experta analiza el riesgo que supone la ingesta de procesados nutridos a base de kilocalorías y grasas saturadas, o las denominadas 'calorías vacías'.

Los cereales comerciales: ricos en inflamación y azúcar

Estos alimentos, según la especialista en nutrición, esconden un alto contenido de azúcares y carbohidratos simples detrás de esa fachada que esconde la cercanía de su envoltorio. Precisamente a través de estos recursos nos encontramos los pasillos de los supermercados repletos de estos productos que a priori parecen inofensivos y captan la atención de los más pequeños. Existe una tendencia prolongada con el paso del tiempo de atracción a un target comercial concreto que se sitúa su objetivos en el interés de los niños "con mascotas alegres y lemas ingeniosos" exclama la doctora.

Una porción de estos cereales contiene tanto nivel de azúcar que equivale prácticamente a la cantidad de consumo recomendada por día. Este acto provoca picos de glucosa en sangre que al mismo tiempo provocan cierta adicción y la aparición de hambre a deshoras. Además, los carbohidratos como componente principal de nuestro desayuno pueden llegar a ocasionar falta de energía, inflamación e irritabilidad, e incluso afecta al rendimiento físico y mental de nuestro día a día.

¿Cuál es el desayuno perfecto para la doctora?

Dejando atrás los cereales, la nutricionista de Harvard recomienda la coordinación de un correcto equilibrio entre grasas saludables, carbohidratos y proteínas. Entre sus favoritos resalta un revuelto con espinacas, tomates y aguacate, por la proteína y las grasas vegetales, como opción salada y un pudin de semillas de chía con arándanos y nueces para los amantes del dulce. La base de un gran desayuno contribuye a estabilizar los niveles de energía a lo largo del día y evitar desequilibrios, y altibajos en el recorrido del día, eludiendo los picoteos y el comer entre horas.