El roscón de Reyes es una costumbre en España desde hace siglos. Aunque tiene su origen en la tradición pagana de las "saturnales" que celebraban en diciembre los romanos en honor a Saturno (dios de la agricultura y las cosechas), esta "torta con haba" ha evolucionado y se ha transformado en diferentes momentos de la historia.

La receta original no llevaba fruta escarchada y, simplemente, se trataba de un bollo seco espolvoreado con azúcar. Por otra parte, el uso de la nata en el roscón se popularizó en la década de 1960 y ahora es el favorito de España, ya que cerca del 80 % de los roscones consumidos en esta época son de esta variedad.

Cada año los españoles consumen alrededor de 30 millones de roscones de Reyes. Sin embargo, no todos son de la misma calidad ni tienen el valor nutricional recomendable.

Los roscones que se venden en los supermercados se han convertido en una de las opciones más asequibles para los bolsillos de los consumidores y, por ello, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha analizado quince de estos bollos, en este caso en la variedad de los que se comercializan rellenos de nata.

Poca nata y muchas grasas

Así, según su estudio este año seis de los 15 roscones seleccionados vuelven a sustituir toda o parte de la nata del relleno por otras grasas, en este caso vegetales, más baratas, como la grasa de palma, de coco, de nabina o de palmiste. Se trata, en concreto, de los roscones de las marcas BM, Carrefour, Dulcesol Black, El Horno de Aldi, Hacendado e HiperUsera.

Además, la OCU ha detectado, como otros años, una presencia excesiva de aditivos: 15 de media, con alguna marca que llega a 20 aditivos diferentes. Así, es habitual encontrar todo tipo de colorantes (sobre todo en la fruta escarchada), conservantes, emulsionantes y agentes de textura, a menudo añadidos con el fin de aguantar la congelación y posterior descongelación a la que hayan sido sometidos. Un tratamiento que explicaría el por qué la almendra esté en muchos casos blanda en vez de crujiente.

En cuanto a la prueba de degustación, los pasteleros advierten que muy pocos bollos se asemejan al tradicional roscón, siendo más habitualmente un brioche ligero. Los mejores, los que presentan aromas ligeros a cítricos, pero, sobre todo, los que se elaboran con mantequilla. Y es que es en esta prueba de cata donde suelen detectarse las principales diferencias. Este año se aprecia una cierta mejora en los aromas empleados, más suaves. Pero también se observan roscones demasiado tostados, algo que debe evitarse por la formación de acrilamida, un compuesto con efecto carcinógeno.

Tras el análisis, la OCU ha elaborado un ranking con los cuatro mejores roscones de Reyes rellenos de nata de venta en los supermercados.

Mejor roscón relleno de nata

Así, el mejor de los 15 roscones seleccionados, por su calidad y su degustación es El Obrador de El Corte Inglés (17,50 €/850g). Calificación global: 70 puntos sobre 100. Degustación: Bollo bien fermentado con azúcar perlado, textura blanda. Buen olor a bollería. Nata de buen sabor, bollería donde se aprecia la mantequilla, tierno, aromas equilibrados.

En segunda posición encontramos el Roscón con nata La Cestera de Lidl. 8,99 €/750g (11,99 €/kg). Calificación global: 68 puntos sobre 100. Degustación: bollo bien fermentado de buen tamaño, con abundante azúcar perlado y de textura blanda. Buen olor a bollería, nata de dulzor equilibrada, el bollo es sabroso, con un sabor a azahar equilibrado.

El tercer puesto lo ostenta el Roscón con nata El Horno Real de Día. 9,99 €/900g (11,10 €/kg). Calificación global: 66 puntos sobre 100. Degustación: Bollo bien fermentado, textura blanda. Presenta dos capas de relleno. Buen olor a bollería. Nata de buen sabor, aromas equilibrados.

En la cuarta posición de los 15 seleccionados se encuentra el Roscón con nata Obrador de Ahorramás. 8,99 €/800g (11,24 €/kg). Calificación global: 64 puntos sobre 100. Degustación: Bollo bien fermentado y algo elástico, textura blanda. Buen olor a bollería, donde destacan los cítricos. Nata de buen sabor, aromas equilibrados.

En cualquier caso, la OCU recomienda comprobar siempre en el etiquetado la ausencia de grasas vegetales como la palma, el palmiste, el coco o la nabina, dando prioridad a aquellos cuyo relleno es exclusivamente nata montada y el bollo está elaborado con mantequilla.