Asistencia 24 horas de última generación para los mayores de Madrid

El envejecimiento de la población es una realidad que cada año va en aumento, por ello cada vez cobra más importancia el desarrollo de herramientas que ayuden a disfrutar de esta etapa con las mejores condiciones de vida y autonomía durante el mayor tiempo posible.

Actualmente, en la Comunidad de Madrid viven solas más de 268.000 personas en su domicilio, un 22,3% del total de la población de 65 años o más, que podría llegar al 30% en el año 2030. El problema de la soledad afecta a la vejez principalmente porque es una etapa donde el número de relaciones personales puede disminuir por pérdidas o situaciones de cambio, como la jubilación o viudedad.

Para abordar este problema, la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid ha puesto en marcha la instalación de los nuevos equipos de teleasistencia avanzada para las personas mayores o con discapacidad en situación de dependencia. Este modelo permitirá mejorar la atención con un seguimiento telemático de los usuarios en su día a día y prevenir y actuar ante cualquier emergencia sin tener que salir de su hogar, 24 horas al día, los 365 días del año.

El objetivo de la teleasistencia avanzada es mejorar la calidad de vida de los mayores, asegurando la intervención cuando tengan una necesidad personal, social o médica; garantizando su seguridad movilizando los recursos que se ajusten a sus necesidades; y, sobre todo, prolongando la permanencia en sus hogares, retrasando el mayor tiempo posible su entrada en residencias o centros de día.

Este nuevo modelo de teleasistencia beneficiará inicialmente a los 76.000 usuarios/as que ya reciben este servicio en la Comunidad de Madrid, aunque se espera que la cifra aumente a 100.000 personas en el futuro. En total, el proyecto contará con una inversión de 82,4 millones de euros y la distribución de 400.000 dispositivos de última generación.

Los dispositivos, tanto fijos como móviles, incluyen avanzadas tecnologías como la geolocalización y la capacidad de comunicación desde cualquier lugar. Entre los equipos se encuentran detectores de humo, gas y caídas, sensores de movimiento, teléfonos con teclas grandes y dispensadores de fármacos programables. Este último dispositivo se configura para 21 días y envía una alarma si el usuario olvida tomar su medicación, contribuyendo a la seguridad y la correcta administración de los tratamientos.

La instalación de estos dispositivos se adapta a las necesidades individuales de cada usuario mediante una evaluación personalizada. No todos los usuarios necesitan el mismo equipo, por lo que primero se realiza un diagnóstico integral antes de su asignación. Además, el servicio contempla reevaluaciones periódicas para ajustar los dispositivos en función de la evolución de las condiciones de los usuarios.

Un equipo de 450 personas

La Dirección General de Atención al Mayor y a la Dependencia es la encargada de gestionar este servicio, que contará con un equipo de 450 profesionales. Este personal, compuesto por terapeutas ocupacionales, fisioterapeutas, enfermeros y psicólogos, brindará asistencia tanto de forma remota como presencial en los domicilios cuando sea necesario. El objetivo de este programa es ofrecer una atención individualizada que responda a las circunstancias particulares de cada usuario.

Ana Dávila, consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid, señala que este servicio busca «ajustarse a las necesidades de cada persona», proporcionando así «una atención integral que va más allá de la simple supervisión». Entre los beneficios del servicio, se incluyen «la tranquilidad y seguridad que aporta tanto a los mayores como a sus familiares, el fomento de la permanencia en el hogar, el apoyo a la autonomía personal y la promoción de un envejecimiento saludable».

Además, el servicio contempla un enfoque integral que incluye asesoramiento psicosocial. Los usuarios podrán recibir visitas programadas para atender dudas médicas, sociales, nutricionales o relacionadas con trámites administrativos. De esta manera, se facilita el acompañamiento en situaciones que lo requieran, mejorando la calidad de vida de las personas mayores y dependientes. Para aquellos con discapacidades visuales o auditivas, también se han diseñado dispositivos específicos que se adaptan a sus necesidades.

Este sistema de teleasistencia avanzada supone un paso importante en la mejora del bienestar de los mayores y dependientes en la Comunidad de Madrid, un modelo que combina tecnología, atención personalizada y un enfoque integral para garantizar que estas personas puedan vivir de manera segura, saludable y con la mayor independencia posible.