El Ferrari 250 GT SWB renace como un Gran Turismo de 1,62 millones de euros

La serie de modelos 250 fue una de las líneas de producto más exitosas de Ferrari en las décadas de 1950 y 1960. Se produjeron un total de 250 coches de carretera entre 1952 y 1964 y algunos de ellos se vendieron por cifras récord en las subastas de los últimos años. Es muy difícil encontrar uno a la venta hoy en día, pero por fin hay una solución para los que buscan un 250 GT SWB. No viene directamente de Ferrari, pero es absolutamente impresionante.

RML es “una de las empresas de ingeniería automovilística de alto rendimiento más importantes del mundo” y está situada cerca de Northampton, en el Reino Unido. Uno de sus proyectos más recientes es el llamado Short Wheelbase, que es básicamente una versión muy modernizada del 250 GT SWB. De hecho, es más que eso, ya que aparte de la plataforma original, el vehículo no comparte casi nada con el raro Ferrari.

El diseño está muy inspirado en el Ferrari 250, pero tiene toques individuales que lo hacen parecer ligeramente más moderno. Por ejemplo, los faros redondos con lentes de proyector integradas y las llantas significativamente más anchas delante y detrás. Otros toques muy interesantes son los tubos de escape cromados en la parte trasera, los retrovisores laterales cromados y las aleaciones de estilo vintage de varios radios.

RML ha construido el Short Wheelbase con una sorprendente atención al detalle. La carrocería en dos partes ha sido ensamblada con el 99% de las dimensiones dentro de una tolerancia de 2,5 mm. La pintura ha requerido capas de imprimación especial para carbono, imprimación normal y una capa base plateada que da al coche piloto este aspecto tan impresionante. Como nota al margen, RML no ha decidido qué nombre oficial dará a este color azul cielo.

Bajo el capó hay un motor V12 de 5,5 litros mejorado que ofrece 479 caballos a 7.000 rpm y 568 Newton-metros de par motor a 5.000 rpm. Esta potencia garantiza que la aceleración de 0 a 100 kilómetros por hora sea de solo 4,1 segundos. La velocidad máxima es de 290 km/h. El V12 está acoplado a una caja de cambios manual de seis velocidades, que envía la potencia a las ruedas traseras con un diferencial de deslizamiento limitado.

RML solo ensamblará 30 ejemplares del Short Wheelbase y cada uno de ellos necesitará aproximadamente seis meses de la A a la Z. Está previsto que alrededor del 70% de la producción se destine a la exportación y el precio base es de 1,35 millones de libras más impuestos locales, lo que equivale a unos 1,62 millones de euros al cambio actual.