Amantes del motor, tenemos una buena noticia: Bizzarrini vuelve a la vida

Detrás de ellos están los empresarios que ya se comprometieron hace años en Aston Martin, incluyendo al ex CEO Ulrich Bez

El nombre de Giotto Bizzarrini puede ser desconocido para muchos, especialmente para los más jóvenes. Pero es un nombre importante en la historia del automóvil: hitos como el Ferrari 250 GTO y el V12 de 3,5 litros del Lamborghini Miura se deben a él.

Un ingeniero que durante un corto (demasiado corto) periodo fue también el jefe de una empresa de automóviles que llevaba su nombre, de la cual nació el 5300 GT Strada, uno de los más potentes y rápidos gran turismo de los años 60. Una aventura que duró de 1964 a 1969 y ahora, más de 50 años después, está lista para volver.

En gran estilo

De hecho, parece que algunos empresarios extranjeros, entre los que se encuentran también Ulrich Bez -ex director general de Aston Martin de 2000 a 2013- y Adeem Investments, que en 2007 se hizo cargo de la empresa británica de Ford, estarían interesados en devolver a Bizzarrini a la vida, con la intención de encontrarle un lugar en el estrecho y rico supercoche Olympus.

Según los rumores, de hecho, en los planes de los nuevos inversores habría que presentar ya en 2021 un primer prototipo de superdeportivo, de tracción estrictamente endotérmica y un precio a partir de un millón de euros. Un coche para unos pocos, muy pocos, con líneas deportivas que no cederán (al menos, esto es lo que dicen los rumores) a la moda de los todoterreno o los crossover. Tal vez, de acuerdo con la historia de Bizzarrini, con motores hechos en USA.

Una operación que ya intentó el Vgm Motors de Giovanni Mariani en 2005, con la presentación del concepto de Ghepardo en el Salón del Automóvil de Ginebra de 2006, pero de la que no nació nada concreto, y que acabó en liquidación en 2011.

Una historia deportiva

Fundada en 1964 en Livorno, Bizzarrini producía coches deportivos en muy pocas unidades: el 5300 GT Strada y el 1900 GT Europa (133 y 25 unidades respectivamente) y los rarísimos P538S, BZ-2001, Kjara y Manta, el primer modelo firmado por Giugiaro como diseñador independiente.

Una gran noticia para los amantes del automovilismo de competición y del más puro diseño italiano que tantos deportivos icónicos nos dejó en la década de los 60.