Tordesillas se vuelca con «Motauros», con más de 9.000 participantes de toda Europa

El alcalde, José Antonio González-Poncela, destaca el crecimiento, año tras año, de la concentración

El olor a gasolina y los derrapajes ya se dejan oler y oír en la localidad vallisoletana de Tordesillas que, un año más, se ha volcado con su concentración motera «Motauros». Desde primeras horas de ayer llegaban de distintos puntos de toda Europa los más de 9.000 participantes que ya están en tierras vallisoletanas para disfrutar del concierto de «Los Secretos» y las exhibiciones de trial, aunque los organizadores esperan alcanzar los 15.000.

El alcalde del municipio, José Antonio González Poncela, se mostró consciente de la importancia de una cita que «cada año va a mejor y que se ha convertido en un referente para los aficionados a las motos de España y, cada vez más, de otros puntos de Europa».

Asimismo, indicó que la concentración supone «una importante inyección económica en cuanto a hoteles, restaurantes y supermercados». González Poncela aseguró que cada vez son más los colaboradores de esta concentración, incluido el Ayuntamiento, que no sólo aporta 10.000 euros, sino que contribuye con la logística, personal municipal y todo lo que requiera la organización.

«Este año esperamos más gente, porque el clima va a acompañar y porque es una concentración en la que se cuida mucho al motero, se organizan muchas actividades y conciertos de calidad, y eso hace que repitan año tras año», explicó el alcalde de Tordesillas.

Moteros de Croacia, Rusia, Portugal e Italia se interrelacionan con otros llegados de diferentes puntos de la provincia, que acuden a esta reunión, en unos casos, porque ya llevan años asistiendo y se ha convertido en una cita ineludible y, en otros, porque han oído hablar de la buena organización y deciden comprobarlo por ellos mismos.

Es el caso de Mario Roldán, sevillano, quien llegó a «Motauros» por primera vez tras la desaparición de «Pingüinos», porque reconoció, a la agencia Efe, que «le gusta mucho la zona» y no quería dejar pasar la ocasión para disfrutar del invierno en «un gran ambiente» con aficionados como él a las dos ruedas.

Ha llegado acompañado por otros dos matrimonios de Huelva y Cádiz, porque «habían oído hablar de esta concentración, de su buena organización», de la que han destacado «sus infraestructuras y servicios, que nos hace estar como en casa».