El arresto no afecta al negocio

l ¿Qué repercusión «real» puede tener la captura de Joaquín Guzmán Loera?

–Hay mucho de «show» debido a las expectativas levantadas, a las leyendas que se tejieron en torno a «El Chapo» hasta convertirlo en un parangón de Al Qaeda, por el peligro que significaba. Se lo comparaba con Pablo Escobar, que fue el amo y señor del narcotráfico en Colombia. Y ahora su captura se va a explotar públicamente y con fines políticos.

l¿Marketing y propaganda?

–Alcanza con mirar las telenovelas, libros, canciones... que hay sobre narcos. Además de ser simbólica, la captura va a disparar la cultura narcotraficante. El cártel de Sinaloa se había involucrado en metanfetaminas y había logrado competir con las mafias chinas y africanas. Ésta es una multinacional exitosa de gente que sabe manejar el negocio del narcotráfico. Su captura también es marketing para el negocio del narcotráfico.

l¿Pero cree que se están realizando avances en la lucha contra el narco?

–El Gobierno mexicano ha asestado grandes golpes al narcotráfico, especialmente a Los Zetas. Ha capturado a más de 20 jefes de células en Tamaulipas. Hace poco capturaron a un hijo de «El Mayo Zambada». Ha venido descabezando a jefes de cárteles presentes en toda América Latina. Sin embargo, esto no varía la dinámica del narcotráfico, que en países como Perú y Bolivia sigue creciendo. O países de tránsito como Guatemala o Centroamérica.

l ¿Qué opina sobre la participación de la DEA en el operativo?

–Cuenta con dos recursos para combatir el narcotráfico que no tiene ninguna agencia de Inteligencia de ningún país de América Latina: dinero y tecnología. Tiene mucha más capacidad que cualquier país latinoamericano para acceder a información privilegiada de los cárteles. El papel de la DEA es fundamental para estos logros. En este caso jugó un papel clave en la captura de «El Chapo», sobre todo para su ubicación geográfica.

*Analista y especialista en seguridad y narcotráfico