Preocupación por el estado de salud de Mette-Marit

Desde 2018, la princesa Mette-Marit sufre una fibrosis pulmonar crónica, una enfermedad degenerativa que provoca la cicatrización del pulmón, que periódicamente la mantiene alejada de los actos oficiales. Una dolencia que ya parecía de carácter estable en el caso de la esposa de Haakon de Noruega pero que contradice con el último parte médico sobre la salud de la princesa que ha emitido el Palacio Real noruego. Poco después de cumplir también los 50 años, y de que ambos lo celebraran con una gran fiesta en Oslo, se comunicaba de forma oficial que la esposa del príncipe heredero estaría de baja por enfermedad durante al menos dos semanas. Un contratiempo por el que no pudo asistir al Jubilo de Oro del rey Carlos Gustavo de Suecia.

Transcurridas esas dos semanas y sin que siga sin haber ni rastro de Mette-Marit en actos oficiales, el comunicado de palacio parece preocupante. Según explica Guri Varpe, jefe del departamento de comunicación, la princesa permanecerá de baja más tiempo de lo previsto inicialmente. "La princesa heredera también será menos activa en el futuro y no tiene ningún evento oficial previsto para esta semana ni para las vacaciones de otoño", reza el comunicado.

La próxima cita a la que está previsto que asista Mette-Marit tendrá lugar el 13 de octubre, con motivo de la inauguración de la sala de equitación del Palacio Real. "Tanto los reyes como los príncipes herederos estarán presentes", se puede leer actualmente en la página web de la Casa Real noruega. De no estar ese día, es posible que asista al 18 cumpleaños del príncipe Christian de Dinamarca, dadas las buenas relaciones entre ambas monarquías.