Solidaria
Desvelamos la compra de la Reina Sofía en el Rastrillo de Nuevo Futuro: "Ha sido muy amable. Es majestuosa"
Su Majestad ha acudido, como siempre, a esta nueva edición del mercadillo solidario, tras tres años de parón por culpa de la pandemia de coronavirus
Tras tres años de parón por culpa de la pandemia de coronavirus, el rastrillo de Nuevo Futuro ha retomado hoy su actividad solidaria en un nuevo escenario: la Galería de Cristal del Palacio de Cibeles. Los más fieles a este mercadillo solidario han guardado horas de cola para poder acceder, como muestra de la emoción y la ilusión que les hacía regresar por todo lo alto.
Como en ocasiones anteriores, la Reina Sofía ha sido la gran protagonista. Acompañada del alcalde José Luis Martínez Almeida, ha llegado a la sede del Ayuntamiento de Madrid pasadas las 13:00 horas de la tarde, y ha sido recibida entre aplausos, vítores y gritos de "¡viva la Reina!" que se han escuchado durante todo su trayecto por los diferentes puestos.
A lo largo del recorrido, tanto ella como el alcalde de Madrid han aceptado fotografiarse con los más curiosos, que se han acercado a ellos tanto como el equipo de seguridad de Su Majestad les ha permitido. Incluso los trabajadores del consistorio se han asomado a las ventanas que dan a la galería, atraídos por el bullicio que la mera presencia de la Reina ha generado en el rastrillo.
Doña Sofía se ha detenido en todos y cada uno de los puestos, ojeando los productos e interesándose por la inconmensurable labor benéfica que desde hace años llevan a cabo los participantes del rastrillo, entre quienes se encuentran la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada o Simoneta Gómez-Acebo, la hija de la infanta Pilar, que ha charlado durante varios minutos con la Reina a su llegada.
Miel, delicias de mazapán y galletas
Especial interés ha mostrado Su Majestad en el puesto de la Carmelitas Samaritanas del Corazón de Jesús, donde se ha hecho con algunos dulces artesanos. "Ha estado viendo primero el mazapán y el turrón, pero lo que más le ha interesado ha sido la miel, las mermeladas y las pastas. Uno de sus asistentes nos ha dicho que le gustan mucho las pastas, así que la hemos invitado a pasar y ha comprado unas cuantas cosas: miel, mermelada, pastas, delicias de mazapán y galletas", comenta a LA RAZÓN una de las hermanas que ha atendido a doña Sofía, a quien solo dirige buenas palabras: "Nos ha saludado muy amablemente y ha accedido a fotografiarse con nosotras. Además, se ha interesado también por cuántas somos, dónde estamos o cómo hacemos los productos. Es una señora, se le nota en todo. Es muy cercana y sencilla, pero majestuosa. Ha sido un honor para nosotras atenderla".
La suya es una opinión generalizada entre todos los participantes del rastrillo de Nuevo Futuro, como es el caso de una de las dependientas de El Potosí, un puesto de ropa en el que también se ha detenido varios minutos, aunque en esta ocasión se ha ido con las manos vacías: "Ha sido encantadora y muy amable, como siempre. Se para en cada puesto y muestra mucho interés, siempre con una sonrisa. No ha fallado ningún año, y no es solo que venga, es que se toma su momentito para cada puesto. Este año no ha comprado nada aquí, pero otros años sí lo ha hecho. Siempre tiene detalles con algún puesto".
Pasadas las 14:00 horas de la tarde, la Reina Sofía ha concluido su visita en el comedor del rastrillo, donde ha disfrutado de un delicioso almuerzo servido por el Grupo Paraguas, propiedad de Sandro Silva y Marta Seco, dueños de ocho exitosos restaurantes en Madrid y dos sucursales de Amazónico en Londres y Dubai.
El rastrillo Nuevo Futuro mantendrá sus puertas abiertas hasta el domingo 19 de noviembre, aunque desde la organización ya tienen la vista puesta en la próxima edición.