Ya han pasado varios días desde que los Reyes Felipe VI y Letizia visitaron Paiporta junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y autonómico, Carlos Mazón. Su intención era solidarizarse con las víctimas y afectados por la DANA, pero su paseo por las calles de la localidad valenciana se convirtió en una odisea que terminó con Sus Majestades repletos de barro.

Una visita muy tensa cuyas imágenes ya se califican de históricas y han dado la vuelta al mundo. Buena parte de la prensa internacional se hizo eco de esa suerte de escrache que los Reyes manejaron de la mejor de las formas, llegando incluso a abrazarse con los vecinos que al principio les increpaban. Una situación de lo más complicada ante la que doña Letizia no pudo contener las lágrimas, una estampa que fue portada en todos los periódicos y revistas de esa semana.

Desde entonces, la Reina se ha mantenido alejada de la opinión pública, reponiéndose en casa del mal trago vivido. Sin embargo, este jueves 7 de noviembre ha retomado su agenda y ha vuelto al trabajo, aunque, eso sí, desde la comodidad de su despacho en Zarzuela.

Doña Letizia se ha reunido con los representantes de Cruz Roja, la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), la Federación Española de Enfermedades Raras (FEDER), la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), la Confederación Salud Mental y el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), todas organizaciones que están colaborando con los afectados por la DANA.

Para la ocasión, la Reina se ha decantado por un sobrio estilo “working girl”, encabezado por una americana que ha combinado con una camiseta blanca. La seriedad se ha impuesto a lo largo de toda la reunión, como muestra de respeto ante la tragedia vivida.

La Reina ha agradecido a las entidades presentes su ánimo de “aglutinar esfuerzos” para ayudar en todo lo posible a los afectados, y ha recalcado la necesidad de “atención constante” ante lo sucedido.

La princesa Leonor, muy preocupada por sus padres

Precisamente, hoy se ha dado a conocer cómo reaccionó la princesa de Asturias al ver a sus padres en la complicada tesitura a la que se enfrentaron en su visita a Paiporta. Como todos los hijos se podrán imaginar, no fue plato de buen gusto para ella.

"La heredera al trono vio a sus padres, Felipe VI y Doña Letizia, como nunca los había visto: manchados de barro, bajo una lluvia de insultos y lodo, rodeados de vecinos que se dirigían a ellos. Vio cómo su padre trataba de calmar los ánimos de los vecinos, de consolar a algunos, y como su madre, que hasta había sido alcanzada en la cara por un trozo de barro, rompía a llorar, mientras algunos escoltas resultaban heridos", recoge el portal "Monarquía Confidencial" que añade que la Princesa Leonor mostró su gran preocupación a sus compañeros de Marín. "Son los reyes, pero para ella son sus padres".