Kate Middleton ha sido una de las protagonistas del fin de semana tras su reaparición en el torneo de Wimbledon. La princesa de Gales presidió la final del campeonato de tenis junto a su hija Charlotte, acaparando todas las miradas. Era la segunda vez que aparecía en público desde que anunció el pasado 22 de marzo que había sido diagnosticada de cáncer y que se encontraba en tratamiento de quimioterapia "preventiva" y había máxima expectación por ver de nuevo a la futura reina de Inglaterra.

Ahora que ya ha terminado Wimbledon, Kate Middleton tiene un largo verano por delante junto a sus hijos, George, Charlotte y Louis. Los príncipes de Gales están deseando pasar tiempo con sus pequeños y descansar después de un año tan intenso para la corona británica. Según fuentes cercanas a la realeza, Según fuentes de la realeza, los futuros reyes de Inglaterra están planeando pasar la mayor parte del verano "lejos del radar" en su refugio en Norfolk. Allí, Kate y Guillermo van a intentar que sus hijos disfruten de unas vacaciones inolvidables y es su único propósito después del año tan complicado que han tenido que vivir los menores tras la enfermedad de su madre y de su abuelo, el rey Carlos III.

"El verano es cuando Kate quiere de verdad que sus hijos disfruten y puedan ser un poco más libres. Y este verano, más que nunca, todo va a girar en torno a los niños", desveló hace unas semanas una fuente cercana a los príncipes de Gales a la revista 'Closer Weekly'. "Cada verano Kate intenta asegurarse de que los niños estén fuera tanto como sea posible" porque, aunque "hay directrices, por supuesto", lo cierto es que "Kate cree que dejarles elegir a ellos hará que las vacaciones sean más memorables", explicó esta fuente sobre las vacaciones de los tres príncipes.

Norfolk, su refugio estival

El destino elegido para disfrutar de sus vacaciones de verano es la finca de Anmer Hall, situada en Norfolk, uno de sus refugios favoritos. Aunque cuenta la leyenda que la mansión está encanta y que hay que "está embrujada por un fantasma sacerdote" que que vivía allí y que fue ahorcado y descuartizado por traición en 1595, lo cierto es que a los príncipes de Gales no les supone un problema y allí han encontrado su oasis particular, donde disfrutan de tranquilidad y privacidad.

Además, según ha desvelado la prensa británica, los príncipes de Gales tienen intención de visitar a Carlos III y la reina Camilla en Escocia este verano, y tienen programadas algunas salidas puntuales, ya que Kate Middleton continúa en tratamiento de quimioterapia.