De ser un centro logístico y de financiación a ser un centro de recursos tecnológicos especializados para que los usuarios y las empresas tengan las mejores soluciones tecnológicas a su alcance. Así resume Alberto Pascual, director ejecutivo de Ingram Micro Iberia, el cambio de rol que han asumido los mayoristas informáticos. “Antes aportábamos logística, financiación y disponibilidad inmediata de productos como ordenadores o impresoras. El mundo tecnológico se ha simplificado mucho de cara al usuario, pero para ello se ha vuelto cada vez más complejo, con una infraestructura por detrás de cada servicio”, relata. En este contexto, el mayorista también ha evolucionado conforme a las necesidades del mercado y “se ha convertido en un centro de recursos especializados para que el integrador, la figura que lleva esas soluciones complejas a un cliente, pueda tener ese conocimiento y personal especializado en áreas como ciberseguridad”.

Algo que se puede ver en tecnologías como el cloud computing o, más recientemente, la Inteligencia Artificial. “Siempre que hay una tecnología emergente que eclosiona, inicialmente suele haber más demanda que capacidad real en el despliegue. Es ahí donde nosotros jugamos un papel esencial, aportando a todo el ecosistema esos recursos especializados”, defiende Pascual, añadiendo que en el ámbito de la inteligencia artificial “el secreto está precisamente en las soluciones verticalizadas adaptadas a las necesidades de cada negocio”.

En este punto, destaca también que son una especie de agente puente entre las ayudas digitales contempladas en el Kit Digital promovido por el Gobierno para aumentar la digitalización de las empresas. “Siempre que ha habido algún tipo de estímulo económico, se ha desaprovechado o no se ha aprovechado en su totalidad por desconocimiento y por complejidad en la en la gestión”, asegura. Así, y aludiendo a los meses que pueden transcurrir entre que se instala una solución en el cliente final y se recibe la ayuda económica, Pascual considera que es “importante que exista un facilitador” de este proceso. “Tenemos herramientas financieras para cubrir ese espacio de tiendo y recursos especializados para completar la solicitud de subvenciones, que a veces son también complejos”.

Además, asegura que las soluciones bajo el paraguas del Kit Digital son “parciales” dentro de todo el proceso de transformación digital de cualquier empresa. “Nosotros actuamos como agregador de la solución completa, tanto de la subvencionada como de la que no lo está, aportando soluciones, financieras y de integración”, señala.

Concentración

Alberto Pascual llegó a la dirección ejecutiva de Ingram Micro después de que esta multinacional comprara, hace 13 años, Areté Sistemas, que fundó junto a Jordi Muñoz.

Este directivo considera que los procesos de concentración en el sector mayorista, impulsados por las economías de escala, ya han pasado y que ahora se viven un escalón más abajo, en el de los integradores, encargados de llevar las soluciones tecnológicas a las empresas. “Estamos viendo muchas operaciones corporativas que permiten a estos integradores aumentar sus capacidades de inversión y mejora de su competitividad”, relata.

Sin embargo, el mayor reto de la distribución para Pascual es avanzar hacia el siguiente paso de su evolución. “La tecnología cada vez se ha vuelto más más compleja. Cada vez resulta más difícil a los integradores ser capaces de construir por sí solos una solución en completa”, relata. La solución, según su visión, son los ecosistemas orientados a propósito y soportados por una plataforma. Es decir, “articular relaciones entre integradores que tienen complementariedades y darles herramientas para poder construir soluciones” que lleguen al usuario final, especialmente si son empresas.

Porque, en su opinión, esa experiencia de compra unificada, personalizada, inmediata y con un solo clic que todos los usuarios particulares tienen aún no ha llegado al mundo empresarial, pero debería hacerlo.