Medidas similares a la última propuesta del Gobierno para facilitar el acceso a la vivienda a los colectivos más desfavorecidos, que el Estado avale el 20% de la hipoteca de primera residencia a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO); han contribuido a incrementar los precios de la vivienda en aquellos países en los que se han aplicado. El caso documentado más reciente es el de Inglaterra. Este país puso en marcha en 2013 el programa «Help to buy», al que puso fin el pasado mes de marzo, para permitir a las familias con menos recursos obtener un préstamo hipotecario avalado por el Estado de hasta el 95% del valor de la casa. La ayuda, aunque ha posibilitado que 340.000 familias consigan un hogar, también ha contribuido a inflar los precios.

«El plan de ayuda para la compra de casas del gobierno ha hecho subir los precios de la vivienda en Inglaterra y no ha logrado ofrecer una buena relación calidad-precio para los contribuyentes», advierte un informe elaborado por la Cámara de los Lores británica que se dio a conocer a principios del ejercicio pasado. El documento añade que «con el actual esquema, los precios se inflan por encima del valor de las ayudas, sobre todo en áreas donde más se necesitan». A este respecto, el análisis abundaba en que el sistema «Help to buy» había provocado que en la capital británica y en aquellos puntos donde había más problemas de demanda, la ayuda se fuera directamente al precio.

El sistema de avales, anunciado el pasado fin de semana por Pedro Sánchez y que se aprobará en el Consejo de Ministros de hoy, no ha sido bien recibido por sus socios ni de gobierno ni parlamentarios. Podemos aseguró ayer directamente que es una «infamia» que va en contra de las medidas necesarias para prevenir burbujas inmobiliarias.

En parecido sentido se manifestó el líder de Más País, Íñigo Errejón, que advirtió de que sólo servirá para inflar los precios. «Que el Estado funcione como avalista para la compra de vivienda a aquellos que ya se lo pueden permitir es una transferencia de dinero público a manos privadas», advirtió Errejón.

Frente a las críticas de sus aliados, el Gobierno sostiene que los avales son una buena medida. La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), Raquel Sánchez, aseguró que se trata de una buena opción que se pondrá en marcha lo antes posible y añadió que no se puede «demonizar» la compra de vivienda en este país, que sigue siendo una opción para mucha gente y a la que hay que dar una respuesta. Respecto a cómo se articularán los avales, fuentes del Mitma aseguraron que están analizando los precios medios de la vivienda por territorios, con el fin de «establecer diferencias en función de las comunidades autónomas». «Queremos entrar en la definición de los criterios, ver los precios medios de la vivienda y, en función de eso, establecer diferencias», explicaron a Efe fuentes del Ministerio de Transportes.

Hasta 50.000 beneficiados

La ministra defendió los avales, que calcula pueden beneficiar hasta a 50.000 personas, tras reunirse junto al jefe del Ejecutivo con representantes del sector de la vivienda, a los que ambos explicaron las medidas que está tomando el Gobierno en la materia y a los que invitaron a sumarse a esta «gran causa nacional». La ministra aseguró que el sector reconoció «expresamente» el buen trabajo que el Gobierno está haciendo en materia de vivienda y recordó las medidas que, junto a los avales, se aprobarán mañana en el Consejo de Ministros. Así, se refirió a un nuevo convenio con el ICO por valor de 4.000 millones de euros destinados a la construcción de 43.000 viviendas para alquiler asequible con fondos europeos, las medidas para movilizar 50.000 viviendas de la Sareb o las 20.000 viviendas que se construirán en los terrenos del Ministerio de Defensa a través de la Entidad Estatal de Suelo (Sepes).