'Isa&Javi', la obra de teatro que destapa el amor entre Ayuso y Milei

Mientras el público entra en la sala, Isa recibe a todos con una sonrisa. En mitad de la pared, Javi, vestido de traje, corre y canta al son de Dick el Demasiado. De fondo, de vez en cuando, ruge una motosierra.

De esta guisa, Valeria Alonso (Buenos Aires, 1979) y Vito Sanz (Huesca, 1982) dan la bienvenida a 'Isa&Javi', un proyecto que nació "a la madrileña", con unas cañas entre los dos intérpretes, y que fue presentado al Teatro del Barrio –actual Premio Nacional de Teatro– en un día tan castizo como el de la Paloma, el 15 de agosto: "Nos pareció seductor aceptar esta comedia romántica dentro del contexto político de nuestro tiempo", defiende Ana Belén Santiago, directora artística del centro.

La función, heredera del lenguaje de Club Caníbal, solo acaba de empezar y, aunque el equipo no lo diga, todo el mundo sabe que Isabel Pip [sonido de pitido] y Javier Pip son Ayuso y Milei. No hay dudas por mucho que jueguen con la ambigüedad: "¿De verdad te parecen ellos?", dicen con media sonrisa en la boca. No se atreven a citar sus nombres.

Sanz, quien interpreta a Isa, pone en valor "las personalidades" de los dos: "Hay algo que los hace muy inspiradores para construir un imaginario, un movimiento, un mundo. Ver en acción al presidente de Argentina o a Trump, al margen de la ideología, es increíble. Por eso atraen a tanta gente. Es maravilloso coger el carácter de ciertos políticos y aumentar sus tics para llevarlos a la sátira". Aprovechan la "fuerza" de estos personajes para trasladarlos a la comedia a sabiendas de que "a veces, la realidad es más grotesca que la ficción", interrumpe Alonso.

Carolina Román, directora del montaje, asegura que, como artista, siente "la obligación de contar nuestra época": "Abordar una realidad e invitar, desde la sátira, a una profunda reflexión. Poner preguntas sobre la mesa", explica de una obra en la que, afirma, "no hay ni buenos ni malos. No tenemos respuestas". "De hecho", puntualiza Óscar Martínez –autor de la pieza junto a Román, Sanz y Alonso–, "cada pregunta nos ha abierto otras veinte".

"Queríamos hacer algo cómico que hablase de ciertas contradicciones políticas e ideológicas. Tocarlo con humor desde un lado punky y esperpéntico para reflexionar sobre la sociedad en que vivimos y cómo nos afecta", cuenta el actor. Y, en consonancia con su compañero de reparto, Alonso recalca el espíritu "divertido" de la pieza: "Nos hemos inspirado en dos políticos, pero podrían ser otros muchos de cualquier parte del mundo. La obra navega las aguas locas de sentirnos en un momento de gran confusión".

La medalla que la Comunidad de Madrid concedió a Javier Milei fue la chispa que provocó 'Isa&Javi' y que, a la larga, desató el amor entre los dos dirigentes dentro de la pieza. A ella le gusta "la energía de Javi", sostiene Sanz. También "la pasión con la que cuenta las cosas y su ideología". A él le vuelve loco la defensa a ultranza de la libertad que hace Isa. Surge el flechazo.

Ambos se entienden desde el momento en el que el argentino aterriza en Barajas. Juntos, cantan a pie de pista. Javier Pip se extiende con las letras e Isabel Pip le termina las frases: "En Madrid, se es madrileño de la Argentina desde el primer día. Libertad para vivir a la madrileña. Que nadie te imponga una forma de vivir, pensar o sentir, Javi. Por eso recibes esta medalla internacional, como antes lo han hecho otros mandatarios como Gandhi, Shakira, Nacho Cano y José Padilla cuya labor siempre se ha desempeñado con la libertad por bandera", recita Sanz en escena, donde también habrá sitio para que aparezca los famosos perros del presidente o su hermana Karin –aquí, Karina Pip–.

Ahí da comienzo un idilio que encaja en los planes de Javi. "Llega a España con una misión bajo el brazo: quiere crear una gran saga, como una especie de gran empresa". Para Román, ambos "cojean del mismo pie" y "el sentido de la libertad tan amplio les encaja" para fundar un partido que, desde la pandemia, "ha ganado muchos más adeptos por medio de Tik Tok e Instagram". Esas serán sus principales herramientas para potenciar Liberland, el partido político con el que pretenden conquistar el mundo". Además, cuentan "amigos que han puesto mucha guita" y con un "gran aliado", Donald Pip, apuntan.

Isa y Javi logran así ganarse el favor de unas nuevas generaciones que se rebelan contra lo establecido. "Ven en Liberland un movimiento punky y rompedor para cambiar el mundo", comenta la directora de una función en la que Vito Sanz y Valeria Alonso "entran y salen de la escena para ver el contraplano de esta historia".

Román asegura que han "investigado mucho sobre estos personajes". Lo que les ha llevado a preguntarse "quién tiene la verdad por votar de una determinada manera. ¿Qué pasa con la otra mitad que piensa diferente?".

La anécdota de la medalla a Milei se amplifica de esta forma hasta la farsa, en la que, como dice Santiago, "se ven los nuevos modos que hemos normalizado en cargos que representan la voluntad popular. Son códigos más propios de las relaciones tóxicas que de hombres y mujeres de gestión. Se aglutina así un tiempo político que se ha llevado al extremo".