Sociedad

¿Cómo se llamaba antes Salamanca? A los amantes del fútbol les sonará

La capital salmantina fue fundada por los vacceos, un pueblo celta, en el siglo IV a.C, que fue el que le puso su nombre de origen

Puente Romano de Salamanca
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El nombre de pueblos y ciudades españoles han ido cambiando con el paso de los años, por el continúo paso de los diferentes pueblos por los que discurrieron por la Península Ibérica. Esto hizo que celtas, romanos, visigodos, árabes y pobladores llegados del norte durante la Reconquista propiciaran el cambio de nombre de lo que hoy conocemos como Salamanca, reconocida en el mundo por su belleza, por su patrimonio monumental, por acoger la Universidad en activo más antigua de España, creada en 1218, y como no podía ser de otra manera, por su rica y variada gastronomía.

Pero no siempre esta histórica ciudad española se llamó Salamanca, en su origen los vacceos, primer pueblo celta en asentarse en la zona en el siglo IV a.C la llamó “Helmántica”, un nombre que sonará a los amantes del fútbol, ya que fue también el nombre durante muchos años del mítico estadio de fútbol, en el que jugó en Primera División la histórica Unión Deportiva Salamanca.

En el siglo III a.C. Aníbal, al mando de los cartagineses, sitía la Ciudad. Los habitantes le ofrecen dinero y rehenes, pero Aníbal no se conforma con eso, lo cual hace que los helmanticenses se levanten contra él, consiguiendo su huida. Posteriormente es conquistada por los romanos, que la integraron en la provincia de Lusitania. En esos momentos la zona llevaba el nombre griego de “Helmantiké”, que significa “tierra de adivinación”.

A partir de este momento, cobró una gran importancia, ya que se situó en el recorrido de la Vía de la Plata, que une norte y sur de la Península, y se convirtió en un relevante centro comercial. En aquella época se construyó el Puente Romano, en pie todavía. Con la llegada de los romanos el nombre fue cambiando, aunque aún no está muy claro su origen.

El astrónomo Claudio Ptolomeo apela a una polis dominada por los vacceos con el nombre de Salmatica o Salmantica. Tito Livio y Plutarco la llamarán Hermandica y Polieno la titula Salmantida o Salmatis. Incluso otros historiadores la denominan Selium y Sentica.

Por otra parte, algunos otros como Justino y más tarde Rui Méndez o Murillo atribuyeron la creación de la ciudad a Teucro, hijo de Telamón, rey de Salamina, que tras ser derrotado en la guerra de Troya, llegó a la PenínsulaIibérica y fundó una ciudad, que recordando su patria llamaría Salamatica. Otra teoría a la que se puede recurrir es a la de la existencia de un dios de los primeros moradores —pastores nómadas y agricultores neolíticos— llamado Helman, cuyo nombre derivó en el topónimo Helmantica.

El filólogo Martín S. Ruipérez aporta una nueva línea interpretativa que se resume en que «el primer elemento de Salamanca, sala- es la designación del vado de un río», «sal- y hel- no pueden relacionarse lingüísticamente el uno a partir del otro» y respecto al segundo elemento -manca «donde algunos creen ver el mismo elemento en el topónimo Talamanca (de Jarama) que, a su vez, coincidiría en su primer elemento con Talavera, y en Simancas, todo lo cual resulta indemostrable», según señala Wikipedia.

Charro

Pero no es la única denominación que se le da a Salamanca. A la ciudad también se la conoce como la capital “charra” que viene del siglo XVIII, momento en el que se comenzó a designar a los jinetes que utilizando picas o garrochas conducían el ganado, y que en la provincia de Salamanca los hubo muy hábiles y numerosos. Por ello, el traje de charro salmantino es un traje de jinete.

Atractivos de Salamanca

Estas son las diferentes teorías del origen del nombre de Salamanca, una ciudad que en la actualidad es reconocida en el mundo, por muchas cosas, pero sobre todo por su numeroso patrimonio monumental, en el que destacan:

Puente Romano

Forma parte de la Vía de la Plata, que unía Mérida con Astorga. Aunque su origen es romano, del siglo I d.C., tan solo son de esta época los quince arcos más cercanos a la ciudad, sufriendo los otros once varias reconstrucciones como consecuencia de las crecidas del Tormes.

A la entrada del mismo se encuentra el verraco celtíbero, escultura granítica en forma de toro, testimonio de la cultura de los vettones, pobladores prerromanos de la ciudad. El verraco es famoso también por la referencia que a él se hace en una de las obras maestras de la literatura española: "El Lazarillo de Tormes". Tanto el toro como el puente forman parte del escudo de la ciudad.

Plaza Mayor

Es una de las más bellas plazas monumentales urbanas de Europa. Comenzó a construirse en 1729 a instancias del corregidor Rodrigo Caballero Llanes. El proyecto fue a cargo del arquitecto Alberto de Churriguera, al que siguió su sobrino Manuel de Lara Churriguera y fue finalizado por Andrés García de Quiñones en 1755.

Situada en el centro de la ciudad, forma un cuadrilátero irregular soportalado, de tres pisos en cada fachada, presidido por el Ayuntamiento. En el Pabellón Real destaca la efigie del rey Fernando III El Santo y los medallones de las enjutas de sus arcos representan a monarcas españoles. En el pabellón sur, o de San Martín en los medallones vemos a ilustres militares o conquistadores, mientras que en el pabellón de petrineros las figuras de los medallones son personajes de la cultura.

Dos catedrales

Se trata de una de las pocas capitales que cuenta con dos catedrales. Una de ellas es la Catedral de Santa María más conocida como Catedral Vieja, dedicada a Santa María de la Sede. Se empezó a construir en el siglo XII y fue fundada por el obispo Jerónimo de Perigrod. La Catedral Vieja estuvo a punto de destruirse cuando se decidió construir la Catedral Nueva pero la idea fue rechazada porque se necesitaba un lugar de culto durante todo el tiempo que durara la obra.

De la fachada original poco queda puesto que fue tapada por otra en el siglo XVII. Junto a ella dos torres una que quedo bajo la torre de la Catedral Nueva y la otra que no se terminó y recibe el nombre de Torre Mocha. Otro de los atractivos de este templo es el retablo principal del siglo XV y el fresco que representa el Juicio Final.

La Catedral Nueva, adosada a la Vieja, se comenzó a construir en 1513, inaugurándose en agosto de 1733. En la promoción inicial intervinieron los Reyes Católicos, a petición del Cabildo Catedral, quien, con los obispos sucesivos, actuó siempre como principal promotor.

Esta Seo fue construida durante los siglos XVI y XVIII y en ella se aprecian los estilos gótico tardío, el renacentista así como el barroco. En el siglo XV surge la idea de construir una nueva catedral debido al gran aumento de la población, ello a causa en gran parte por las personas que estudiaban en la Universidad de Salamanca.

Universidad de Salamanca

La Universidad de Salamanca fue fundada por Alfonso IX en 1218 y es la más antigua de las que existen en la actualidad. El edificio histórico principal está en uno de los laterales del Patio de Escuelas. Su construcción comenzó en 1415. Y por su relación con la ciudad, las principales publicaciones del mundo consideran a Salamanca el “Oxford” español.

En este patio se encuentra también el Hospital del Estudio, que hoy en día es la sede del Rectorado y cuya fachada está coronada por una fantástica crestería renacentista. En el centro del Patio de Escuelas se puede ver una señorial estatua de Fray Luis de León, que fue uno de los más destacados profesores que ha tenido la Universidad.

Como curiosidad se debe mencionar la rana situada sobre una calavera. Según la tradición, si el estudiante no logra ver la rana no conseguirá aprobar. Ahora bien, en su origen la rana simbolizaba la lujuria que conduce a la muerte al estar situada sobre la calavera y servía para que los estudiantes no olvidaran que debían dedicar sus esfuerzos al estudio y no caer en la lujuria.

La Casa de las Conchas

Se trata del monumento más representativo de la época de los Reyes Católicos de arte civil. Construido a finales del siglo XV, en esta casa se funden los restos góticos, moriscos e italianos. Su fundador fue el Doctor Rodríguez Arias y su motivo ornamental lo constituyen las conchas, símbolo de la Orden de Santiago, de la que era canciller.

Las ventanas de los pisos altos son ornamentadas con frontones de variadas arquerías góticas, mientras que las de los pisos inferiores muestran algunos de los mejores ejemplos de rejería gótica de España. Lo más llamativo del edificios se encuentra en su fachada la cual cuenta con más de 300 conchas que decoran todo el edificio así como blasones y escudos y preciosas rejas que cubren las ventanas.

La Clerecía

Es el nombre que recibe el edificio del antiguo Real Colegio del Espíritu Santo (o Santo Espíritu) de la Compañía de Jesús, construido en Salamanca entre los siglos XVII y XVIII. Es de estilo barroco. Se diferencia el colegio, con un interesante claustro, y la iglesia, con una impresionante fachada de tres cuerpos. El nombre de Clerecía se debe a una denominación abreviada de su pertenencia a la Real Clerecía de San Marcos tras la expulsión de los jesuitas de España.

En 1940, se crea la Universidad Pontificia de Salamanca, instituida por el papa Pío XII, y la Diócesis le entrega el edificio como sede. Pese a que en esa entrega no se incluía el templo del Espíritu Santo, la Universidad Pontificia suprimió el culto en él desde septiembre de 2012 para poder ser explotado turísticamente. Solo se permiten celebrar bodas de antiguos alumnos y personas vinculadas con la Universidad Pontificia.

El Huerto de Calixto y Melibea

Se trata de un pequeño espacio ajardinado que está situado sobre la muralla y desde el que se pueden ver unas hermosas vistas de las Catedrales y de la ribera del río Tormes. Se halla en el espacio donde se cree que Fernando de Rojas ubicó el lugar de encuentro de los protagonistas y escenario del trágico desenlace de la célebre novela "La Celestina".

A la entrada del Huerto hay una estatua que representa a la alcahueta más famosa de la literatura española. En la parte inferior de la escultura se puede leer una inscripción que dice: "Soy una vieja cual Dios me hizo, no peor que todas. Si bien o mal vivo, Dios es el testigo de mi corazón.", palabras sacadas de la famosa obra literaria.