Sociedad

¿Cómo se llamaba antes Valladolid? El origen es más que curioso

Además la ciudad cuenta con un sobrenombre, "Pucela"

Plaza mayor de Valladolid
Plaza Mayor de Valladolidlarazon

Valladolid es una ciudad con mucha historia. Aunque muchos lo desconozcan fue capital de España desde el 11 de enero de 1601 hasta el 4 de marzo de 1606, bajo el reinado de Felipe III y por influencia del duque de Lerma. Se trataba de una ciudad próspera y culta, sede de las Cortes de Castilla.

Pero vamos a retroceder un poco en el tiempo. Vamos a irnos a sus orígenes y las hipótesis de su nombre. La historia de Valladolid se remonta a la Edad Media. Aunque existen indicios de asentamientos pertenecientes al Paleolítico inferior, Valladolid no tuvo una población estable hasta la Edad Media. Durante la repoblación de la Meseta, Alfonso VI encargó al conde Pedro Ansúrez su poblamiento, otorgándole el señorío de la misma en 1072. Desde esta fecha se inicia el crecimiento, de la población, dotándose de distintas instituciones; Iglesia Colegial, Universidad o Alcázar Real.

Esto le permitió convertirse en sede de la corte castellana y posteriormente entre 1601 y 1606 capital del Imperio español hasta que la capitalidad pasó definitivamente a Madrid. A partir de entonces, se inicia un periodo de decadencia que solo se salvará con la llegada del ferrocarril, en el siglo XIX, y con la industrialización de la ciudad, ya en el siglo XX.

El paso de romanos, celtas, visigodos o árabes por la Península Ibérica han hecho que su huella siga presente en nuestros días y que hayan dado origen al nombre de muchas ciudades. Sin embargo, aún sigue siendo un misterio para muchos su origen, o incluso surgen varias hipótesis. Es el caso de Valladolid, que según cuentan algunos el origen más probable del nombre de la ciudad proviene de la expresión celta Vallis tolitum (Valle de Aguas), y es que Valladolid se encuentra enmarcada en la confluencia del río Pisuerga con el río Esgueva. Este último atravesaba la ciudad en dos ramales, hasta que a finales del siglo XIX se llevó a cabo su canalización.

La relación de Valladolid con el río Esgueva era ambivalente. Servía de colector de aguas residuales, por lo que impedía beber sus aguas, la insalubridad máxima y contaba con olores fétidos, pero a la vez se utilizaba para lavar y era fuerza motriz para fábricas y talleres.

A partir de 1840 y hasta 1864 Valladolid experimenta un importante desarrollo económico: se pone en servicio el Canal de Castilla y completa la línea ferroviaria Madrid-Irún, por lo que el equilibrio se rompe. De este modo el Esgueva se decide cubrir en las zonas centrales de Valladolid, y encauzar en las zonas periféricas. Además, también el río Duero atraviesa el municipio por el núcleo de Puente Duero, al sur de Valladolid. El Pisuerga, principal río de la ciudad, ofrece en la actualidad diversas opciones de ocio y cultura.

Sin embargo, otras hipótesis afirman que viene de la contracción de Valle de Lid, ya que por su llanura eran varios los clanes y tribus prerromanas que se reunían para sus enfrentamientos. Hay una teoría afirma que en la época andalusí se llamó Balad al-Walīd exónimo árabe usado actualmente y que significa «puebla de Walid» o «villa de Ulit» en alusión quizá al califa omeya Walid I, que gobernaba el Imperio islámico en el momento de la conquista árabe, pero más probablemente a algún posible gobernante o propietario árabe local llamado Walid o cristiano con dicho nombre (sea cual sea el caso, este común nombre árabe Ulit se castellanizaría en Olit u Olid).

También hay otra relacionada con el gentilicio “vallisoletano” que puede venir de la edad media cuando llamaban a esta provincia castellana y leonesa “Vallisoletum” o “Valle del Sol” debido al gran número de horas al año que brilla en lo alto de la ciudad.

Además, Valladolid cuenta con la curiosidad de tener el nombre de “Pucela”. ¿Pero de dónde viene? Son varias las teorías sobre el origen de esta palabra para referirse a los vallisoletanos.

La primera, fechada en el siglo XV, se refiere a que en esta época caballeros vallisoletanos fueron con sus tropas a Francia, a luchar del lado de Juana de Arco, la “Doncella de Orleans”. En francés, doncella se dice “pucelle”, y en el castellano de la época, la palabra era muy parecida: “Pucela”. A su regreso, los caballeros contaron sus hazañas con la ‘pucela de Orleans’, lo que derivó en el término pucelanos, y Pucela a la ciudad.

Otra teoría dice que Valladolid se encuentra en un valle y está regada por el Pisuerga, el Esgueva y el canal de Castilla. Sería una charca en un entorno seco. Esa charca se puede llamar poza, o su diminutivo pozuela, del cual derivaría pucela.

Una tercera, defendida por etnógrafo Joaquín Díaz, señala que la palabra pucela derivaría de la exclusiva que tuvo la ciudad con los cementos de Pozzuoli (Italia), Puteoli en tiempos romanos, de donde resulta puzolana. Al ser Valladolid la ciudad desde la que se distribuían, se les conocía como pucelanos a los vallisoletanos que entregaban las cargas.

Finalmente, existe otra hipótesis sostenida por el académico César Hernández que gusta menos, puesto que hace referencia al mal olor que en el siglo XVI había en la ciudad como consecuencia de la falta de un sistema de saneamiento adecuado.

Lo que está claro es que Valladolid se ha convertido en un referente patrimonial y turístico de España, y ahora con el nombre que más se la reconoce es la "capital mundial de las tapas" por la celebración del campeonato culinario que estos días se puede disfrutar en la ciudad.