La cascada de los colores, un paisaje que parece salido de Jurassic Park

La Palma mantuvo en vilo a todo el país hace tres años cuando el volcán entró en erupción y arrasó con cultivos y casas que estaban en las laderas. Ese incidente situó en el mapa una de las islas más desconocidas de Canarias y reactivó el turismo de forma notable. La conocida como la "Isla Bonita" (que encandiló a Madonna de los años 80) tiene numerosos atractivos y son muchos los que se sorprenden al ver su exuberante naturaleza y paisajes impresionantes. Además de las rutas de senderismo, la gastronomía o las playas, esconde muchos secretos. Uno de ellos parece salido de la Película de Jurassic Park. Se trata de la cascada de los colores, un espectáculo natural que atrae a amantes de la naturaleza, fotógrafos y aventureros de todo el mundo.

Ubicada en el municipio de Los Tilos, la cascada de los colores es un fenómeno natural que se forma por la combinación de minerales en el agua y la vegetación circundante. Durante ciertas épocas del año, el agua que cae desde las rocas se tiñe de tonalidades vibrantes, creando un espectáculo visual que parece sacado de un sueño. Para llegar a este lugar mágico, se recomienda realizar una caminata por los senderos que serpentean a través del bosque de laurisilva, un ecosistema único que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

La mejor época para visitarla es durante los meses de primavera y otoño, que son las estaciones en las que la temperatura es más agradable para hacer la caminata. En verano, el calor puede ser un serio inconveniente y hacer el recorrido más duro. También durante los meses de invierno las condiciones se pueden hacer más complicadas debido a las lluvias en incluso nieves que suelen afectar a la zona. En cualquier caso es importante estar preparado para las condiciones climáticas y llevar ropa adecuada.

Otros lugares de interés que visitar en La Palma

Además de la cascada de los colores, La Palma ofrece una variedad de lugares que merecen ser explorados como el Parque Natural de Las Nieves, un lugar ideal para los amantes del senderismo. Ofrece rutas con vistas panorámicas de la isla y la oportunidad de observar la flora y fauna autóctona.

Los amantes de la astronomía no pueden dejar de visitar el observatorio astronómico de Roque de los Muchachos, donde las noches despejadas ofrecen un espectáculo estelar inigualable.

Tampoco se puede dejar de dar una vuelta por la capital de la isla, Santa Cruz de La Palma, un lugar lleno de historia y cultura, con calles empedradas y edificios de arquitectura colonial, que trasladan a otra época y lugar.

Para comer, es imprescindible hacer una parada en el restaurante El Jardín, ubicado en Los Tilos, donde se pueden degustar los platos típicos canarios elaborados con productos de la región y dónde no se puede dejar de probar el mojo picón y las papas arrugadas.