El desconocido motivo por el que se usan adelfas en las carreteras y autovías españolas

La Nerium oleander, conocida comúnmente como adelfa o "laurel de flor", es un arbusto frondoso que puede crecer hasta convertirse en un pequeño árbol de entre 5 y 6 metros de altura. Sus flores, muy olorosas, pueden presentar colores variados como rosa, salmón, púrpura, blanco o crema. Los frutos de la adelfa son vainas alargadas de 8 a 16 cm de largo, que se abren solo por un lado. Además, esta planta se caracteriza por mantener su follaje verde durante todo el año, lo que la convierte en una opción ideal para añadir color a cualquier paisaje.

La planta más venenosa del mundo

La adelfa es considerada la planta "más venenosa del mundo" debido a las potentes toxinas presentes en varias de sus partes. La ingesta de una mínima cantidad de sus hojas o flores puede provocar graves efectos como convulsiones, vómitos, diarrea, taquicardias, e incluso la muerte en casos de consumo en grandes cantidades.

Un caso famoso ocurrió durante la Guerra de la Independencia Española en 1808, cuando un grupo de soldados del ejército napoleónico sufrió las consecuencias del mal uso de la adelfa. Utilizaron estacas de esta planta para asar carne, lo que resultó en la muerte de ocho soldados y la intoxicación grave de otros cuatro.

Sin embargo, la toxicidad de la adelfa ha sido exagerada en numerosas ocasiones. Se ha llegado a sugerir, sin fundamento, que solo con dormir bajo su sombra o beber agua de una fuente cercana se pueden sufrir efectos negativos como la caída del cabello. Esto es completamente falso y carece de fundamento científico. Los estudios muestran que se necesita una exposición mucho más directa a la planta para experimentar efectos adversos.

Ahora bien, el hecho de que sea una planta venenosa, no impide que se use intensamente para decorar los espacios públicos, sobre todo en las medianas de las carreteras y las autovías. Pero, ¿Por qué?

Por qué usar una planta tóxica en espacios públicos

Lo cierto es que hay varias respuestas. En primer lugar, como se mencionó anteriormente, las hojas de la adelfa se mantienen verdes durante todo el año. Esto la convierte en una opción popular para embellecer áreas públicas, especialmente en climas como el nuestro, donde muchas plantas pierden su color durante los meses del otoño y el invierno.

También debemos destacar que la adelfa crece rápidamente, es muy resistente, requiere poco mantenimiento y es económica. Esta planta puede soportar condiciones adversas como sequías y suelos pobres, y aun así florecer abundantemente sin necesidad de cuidados intensivos. En este sentido, es un ‘chollo’ para los ayuntamientos, que suelen buscar soluciones de paisajismo sostenibles y de bajo costo.

El tercer motivo por el que se plantan en las medianas de las carreteras y autovías, y posiblemente el más importante, es que su frondosidad actúa como una barrera visual entre los carriles de tráfico opuestos. Esta separación visual es crucial para evitar que los conductores se deslumbren por las luces de los vehículos que vienen en sentido contrario, especialmente durante la noche. Al reducir el deslumbramiento, se mejora la visibilidad y la seguridad en la carretera, disminuyendo el riesgo de accidentes causados por la ceguera temporal que puede provocar el resplandor de los faros.

Otro motivo por el que la adelfa es una de las plantas más comúnmente utilizadas para adornar las medianas es su capacidad para amortiguar el impacto en caso de un accidente. En el desafortunado caso de que un vehículo pierda el control, existe la esperanza de que la adelfa puede ayudar a evitar que este cruce la mediana y entre en el carril contrario, lo cual podría resultar en una colisión frontal aún más peligrosa.