Movilidad

Barcelona endurece las restricciones a la circulación de automóviles

El ayuntamiento amplía las Zonas de Bajas Emisiones, lo que afectará a casi la cuarta parte de los desplazamientos en coche de los particulares

Cartel que delimita la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en Barcelona
Cartel que delimita la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en BarcelonaDavid ZorrakinoEuropa Press

La capital catalana sigue avanzando hacia su objetivo de reducir significativamente el uso del vehículo privado para 2030, con nuevas restricciones de acceso a ciertas áreas urbanas implementadas para este mismo año. Pese a las protestas de los ciudadanos y automovilistas, el ayuntamiento las pone en marcha, lo que dificulta notablemente la vida diaria de los conductores que necesitan desplazarse por la ciudad.

Pese a las protestas que la medida está provocando por parte de los ciudadanos, el Ayuntamiento de Barcelona ha endurecido los criterios de acceso para vehículos sin etiqueta ambiental y ampliado las ZBE, afectando a trabajadores y residentes de las áreas metropolitanas. Según datos del estudio realizado por el Instituto Metropolitano, aproximadamente el 23,2% de los desplazamientos diarios en Barcelona se realizan en vehículo privado, lo que subraya la necesidad de alternativas viables. Además, el plan contempla nuevas medidas, como la ampliación de carriles para bicicletas, mejoras en la red de transporte público y un aumento en la disponibilidad de parkings disuasorios en las entradas de la ciudad.

Los aparcamientos disuasorios, en manos de empresas particulares muchos de ellos, están situados estratégicamente cerca de estaciones de metro, tren o autobús. Estos espacios permiten a los usuarios dejar su coche en las afueras y continuar su trayecto en transporte público. Pero con frecuencia estos espacios se encuentran muy ocupados, por lo que se aconseja la reserva previa por horas, días, semanas o incluso abonos mensuales.