Un agente de la Policía Nacional, identificado como David, salvó la vida de su vecino mientras se encontraba fuera de servicio. La situación se desató cuando el agente, en la madrugada del pasado 8 de junio, escuchó gritos de auxilio que venían del patio interior de su edificio. Identificando la urgencia, el agente logró localizar el origen y se dirigió rápidamente al domicilio correspondiente.

Cuando llegó a la vivienda, una mujer en avanzado estado de embarazo le informó que su marido estaba inconsciente y necesitaba ayuda inmediata. Al entrar, David encontró al hombre tendido en la cama y echando espuma por la boca, síntomas característicos de un ataque epiléptico.

El agente colocó al hombre en la posición lateral de seguridad para evitar que se asfixiara y comenzó a aplicar las primeras maniobras de auxilio. La situación se complicó por el estado de shock de la mujer, quien tenía dificultades para explicar la emergencia al operador del 112. David también tomó el control de la llamada y proporcionó información precisa para poder recibir instrucciones del operador hasta la llegada de los servicios de emergencia.

Poco después, agentes de la Policía Nacional y sanitarios del Samur-Protección Civil llegaron al lugar. Gracias a la rápida actuación de David, el hombre, que había sufrido un ataque epiléptico a raíz de una intervención quirúrgica hace un año, pudo ser estabilizado y trasladado a un centro médico para recibir atención especializada.

En señal de agradecimiento, la pareja remitió una carta al director general de la Policía Nacional destacando la actuación del agente, al que solo conocían de verlo en el barrio. Ahora, la Policía Nacional ha compartido un vídeo en sus redes sociales mostrando el reencuentro de los tres y asegura que la mujer ha agradecido "emocionada" a David que salvase la vida a su marido.