Castilla y León
Sanidad amplía el programa de atención al final de la vida en Zamora, Ávila y Valladolid
Además de los cuidados paliativos se ofrece apoyo psicológico, social y espiritual
Ampliar el programa de atención integral al enfermo y sus familiares en el tramo final de la vida en los hospitales de Zamora, Ávila y Valladolid. Ese es el objetivo del nuevo acuerdo entre la Consejería de Sanidad y la Obra Social «la Caixa» firmado ayer por Antonio María Sáez Aguado y Marc Simón Martínez.
Así, la iniciativa, que ya cuenta con casi diez años de recorrido en Castilla y León complementando la labor en cuidados paliativos de la Gerencia Regional de Salud, podrá seguir colaborando con el modelo de atención para lograr cubrir los aspectos psicosociales: tanto la esfera emocional, social y espiritual del paciente y su familia como la atención al duelo y el apoyo a los profesionales de esta rama.
En este sentido, hasta finales de septiembre el programa atendió a 5.234 enfermos y 10.105 familiares y en lo que va de año, han pasado por las dos unidades que hay en la Región un total de 2.567 personas.
Actualmente, este servicio se desarrolla en Castilla y León a través de dos equipos de atención psicosocial (EAPS). El de Salamanca, el primero que se implantó en la Comunidad, trabaja a través de la Asociación para el Desarrollo de los Cuidados Paliativos y Tratamiento del Dolor de la Región, y actúa en el Hospital Universitario de Salamanca, el Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid, el Complejo Asistencial de Ávila y el Complejo Asistencial de Zamora.
En el 2014, la Fundación «la Caixa», con el apoyo de la Junta, extendió el servicio a Burgos y se implementa en el Hospital Universitario de la capital, así como en el Santos Reyes de Aranda de Duero y en el Santiago Apóstol de Miranda de Ebro.
El mantenimiento de este complemento a los cuidados que reciben los enfermos supone una inversión anual de 450.000 euros destinados a que los cinco psicólogos y los tres trabajadores sociales que ejercen su labor en los quipos de la Región atiendan del mejor modo posible a todos los pacientes.
Finalmente, el convenio apoya también al Programa de Final de la Vida y Soledad, para que las personas que están solas y enfermas tengan acompañamiento de voluntarios de la entidad hasta el momento de su fallecimiento.