Asedio a Gaza
Israel redobla su ofensiva terrestre en el norte y el sur de la Franja de Gaza
Netanyahu vuelve a desoír la llamada a una «pausa humanitaria» del secretario de Estado de EE UU, Antony Blinken
Tras completar el cerco de la Ciudad de Gaza, la principal localidad de la Franja, las Fuerzas Armadas de Israel (FDI) prosiguen su ofensiva contra Hamás llevando a cabo una doble incursión terrestre en el norte y el sur del territorio. Entretanto, el secretario de Estado de EE UU, Antony Blinken, pedía nuevamente sin éxito «una pausa humanitaria» al gabinete de guerra presidido por Benjamín Netanyahu, que insiste en que ello no ocurrirá hasta que los terroristas no liberen a los 242 rehenes en su poder.
Después de siete días de incursiones terrestres en la Franja, las tropas israelíes han conseguido dividir en la práctica el territorio en dos. Las FDI libran encarnizados combates cuerpo a cuerpo en distintos puntos del norte de Gaza. De acuerdo con el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, sus tropas han logrado abatir a 12 comandantes de batallones de la rama armada de Hamás. Los mandos militares israelíes están convencidos de que en la Ciudad de Gaza, situada en la zona norte del territorio dominado por Hamás desde 2007, se esconden los miembros principales de la organización islamista y su red de túneles y arsenal bélico.
A pesar de las llamadas de los mandos militares israelíes a la población para que desalojase la zona norte de Gaza, aún permanecen allí entre 350.000 y 400.000 personas después de que pusieran rumbo al sur del territorio entre 800.000 y un millón de residentes gazatíes, según el enviado especial de EE UU para Asuntos Humanitarios en Oriente Medio, David Satterfield. Se estima que más de 1,5 millones de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares.
Una jornada más, y a pesar de la intensidad del operativo antiterrorista israelí, Hamás volvió a lanzar proyectiles desde la Franja hacia territorio israelí, lo que hizo sonar las alarmas en las comunidades fronterizas con Gaza. Según el diario Haaretz, los sistemas antimisiles israelíes lograban interceptar en la ciudad de Eilat –a orillas del mar Rojo– el cohete que, hasta la fecha, ha llegado más lejos –al recorrer 250 kilómetros– de los disparados desde Gaza. Entretanto, la organización palestina bloqueó la salida de extranjeros por el paso de Rafah.
Un día después del discurso deHasán Nasrala, Hizbulá –que aseguraba haber impactado en seis posiciones militares israelíes– volvía a lanzar misiles contra el norte de Israel, lo que obtenía una respuesta inmediata de las Fuerzas Armadas israelíes. «En respuesta a los intentos de dos células terroristas de dirigir fuego desde Líbano hacia territorio israelí, golpeamos a las citadas células y un puesto de observación de Hizbulá», afirmaban las FDI en un comunicado.
En una visita a las unidades del Ejército hebreo destacadas en el área más próxima a la frontera con Líbano, el ministro de Defensa Israel, Yoav Gallant, lanzó una advertencia al líder del partido-milicia chií: «Si Nasrala comete un error, determinará el futuro de Líbano». «No estamos interesados en una guerra en el norte, pero estamos preparados para cualquier misión», remató Gallant.
El operativo antiterrorista israelí volvió a incrementar el número de víctimas mortales entre la población gazatí. Según el Ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por Hamás, uno de los bombardeos de las FDI golpeó en una escuela de Naciones Unidas situada en el campamento de Yabalia, dejando 12 víctimas mortales que buscaban refugio en las instalaciones. Una investigación el diario The New York Times asegura que Israel lanzó el pasado dos bombas de más de 900 kilogramos sobre Yabalia.
Asimismo, las autoridades palestinas denunciaban la muerte de «decenas de personas» como consecuencia de un bombardeo en los alrededores del hospital Al-Shifa, el principal de Gaza, que impactó en una ambulancia, que, según Israel, era usada por Hamás.
Las autoridades sanitarias palestinas elevan hasta casi 9.500 la cifra de víctimas en Gaza desde que comenzara el operativo de las FDI contra Hamás. En el lado israelí son ya 24 los soldados muertos en los choques con los milicianos de la organización islamista en el interior de la Franja, según el balance reconocido por los mandos militares israelíes. Además, 1.400 personas entre civiles y militares murieron como consecuencia de la incursión terrorista de las brigadas Al Qassam; 242 rehenes permanecen en el interior de Gaza cautivos de Hamás.
[[H4:Blinken pide en vano una «pausa humanitaria»]]
El secretario de Estado de EE UU Antony Blinken pidió nuevamente en vano desde Jordania «una pausa humanitaria» en Gaza. El jefe de la diplomacia estadounidense la supeditó, con todo, al «derecho de Israel a la defensa propia», precisando que Tel Aviv «debe adoptar todas las medidas posibles para evitar pérdidas civiles».
Blinken se mostró, en cambio, contrario a solicitar el «alto el fuego inmediato» que le exigieron en Amán los ministros de Exteriores de Emiratos, Arabia Saudí, Qatar, Egipto, Jordania y la OLP argumentando que ello podría «ser contraproducente» en la lucha contra Hamás. Por otra parte, el secretario de Estado elogió «el papel esencial de los países de Oriente Medio al evitar la extensión del conflicto Israel-Hamás» y pidió la entrada desde Egipto a través del paso de Rafah, el único con la Franja no controlado directamente por Israel, de más ayuda humanitaria.
Por su parte, su homólogo jordano, Ayman Safadi, afirmó que Israel «comete crímenes de guerra» y que «la región entera se está hundiendo en un mar de odio que marcará a las próximas generaciones». Finalmente, según Blinken los ministros de Exteriores de los Estados árabes representados en el encuentro en Amán coincidieron en la necesidad de poner fin al actual statu quo en la Franja después de dieciséis años controlada por Hamás.
Turquía, al borde de la ruptura con Israel
Entretanto, Turquía ha llamado a consultas a su embajador en Tel Aviv como consecuencia de la guerra que las FDI libran en Gaza. Días después de haber calificado a Hamás de «grupo de luchadores por la liberación» y de haber cancelado un viaje a Israel, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan aseguraba haber «borrado» para siempre al primer ministro Netanyahu: «Ya no es alguien con quien podamos hablar».
La decisión de Ankara ha provocado una airada respuesta del Gobierno israelí, que, a través de su ministro de Exteriores, acusaba al presidente turco de «situarse del lado de la organización terrorista Hamás». A pesar de la creciente crisis diplomática entre Turquía e Israel y de las protestas contra la visita en las calles de las principales ciudades turcas, Blinken continuará el domingo su gira regional en Ankara.
✕
Accede a tu cuenta para comentar