La amenaza rusa

La paz en Europa vuelve a estar amenazada en el 80 aniversario del Desembarco de Normandía

La invasión rusa en Ucrania marca los actos solemnes en la playa de Omaha con la presencia de los veteranos y 25 líderes internacionales

Europa y EE UU conmemoran este jueves el 80 aniversario del desembarco de Normandía con una gran ceremonia en la playa de Omaha cargada de simbolismo por varias razones y con la música bélica de fondo tras la invasión rusa de Ucrania. La primera de ellas es la de la memoria histórica ya que, probablemente, ésta sea la última con testimonios en vida de algunos de sus protagonistas. Unos 200 veteranos acudirán a Normandía hoy, algunos de ellos muy mayores y en condiciones muy frágiles de salud pero que han decidido hacer un último gran esfuerzo que la presidencia francesa pone en valor. La mayoría del grupo son estadounidenses, aunque también hay varios británicos, canadienses y un pequeño grupo de diferentes nacionalidades que se sumaron a los veteranos. Su presencia esta vez estará cargada de emoción. Será muy probablemente, por ley de vida, la última vez que vean el cielo normando y la arena de esas playas donde desembarcaron cientos de miles de soldados aliados el 6 de junio de 1944, marcando el comienzo de la liberación de Francia y de Europa del yugo nazi.

"Somos perfectamente conscientes de que para estos centenarios, esta es quizás la última oportunidad de volver a las playas donde desembarcaron, donde lucharon y donde cayeron sus hermanos en armas" ha subrayado el general Michel Delion, CEO de la agencia del gobierno de Francia a cargo de los esfuerzos de conmemoración francesa. El más joven de los veteranos estadounidenses tiene 96 años. La mayoría de los veteranos viajan a Francia acompañados de todo un equipo de personal médico. La esposa del presidente francés, Brigitte Macron, ha sido la encargada de dar la bienvenida a los primeros veteranos que empezaron a llegar a Normandía, a quienes expresó "el más profundo respeto y el más profundo amor" de Francia, en un video publicado en la red social X.

Más que una presencia, la otra carga simbólica viene de una ausencia: Rusia, que siempre tuvo un rol de protagonista esencial en estas ceremonias por el papel que desempeñó el ejército rojo en el final de la II Guerra Mundial. 80 años después Rusia es la amenaza de Europa. Su histórica ausencia conecta con la presencia de Zelenski a la ceremonia internacional de esta tarde en la playa de Omaha. Fuentes del Elíseo justifican que así sea “en razón de la resonancia histórica del desembarco con el justo combate de Ucrania”. La intención de Macron es clara: poner de relieve ese vínculo entre pasado y presente unidos contra un yugo y eso se quiere poner de manifiesto en esta ceremonia en una fórmula que puede propinar un duro castigo al Kremlin en lo simbólico.

Zelenski acudirá a la ceremonia internacional a primera hora de esta tarde junto a otros 25 jefes de Estado y de Gobierno, incluidos varios monarcas como los de Países Bajos o Bélgica. También estará Joe Biden, que llegaba ayer miércoles a Francia recibido a pie de pista por el primer ministro Gabriel Attal y que prolongará su visita en Francia hasta el domingo. Biden y Macron tendrán agenda aparte y se verán en el Elíseo el sábado para tratar los dos conflictos, Ucrania y Gaza, con la perspectiva electoral en Estados Unidos. Y también la duda de si ambos mandatarios mantendrán a tres un probable encuentro con Zelenski en privado durante estos días. Sí se ha confirmado que Biden se verá con Zelenski en dos ocasiones.

Hoy en Omaha Beach también podremos ver al príncipe de Gales y el rey Carlos III, al "premier" Rishi Sunak, al canciller Olaf Scholz o al presidente italiano Sergio Matarella. En total, 25 jefes de Estado y Gobierno con la presencia de los reyes de Bélgica y Holanda. Antes de la ceremonia central, las delegaciones británica y americana celebrarán sus respectivas ceremonias en el memorial británico de Ver sur Mer y en el cementerio americano con la presencia de sus líderes políticos. Macron acudirá por separado a ambas ceremonias al lado de Carlos III y Biden, respectivamente.

Dispositivo de seguridad

Con tantos jefes de Estado en la ciudad, las medidas de seguridad son intensas. El Ministerio del Interior francés informó de que el 6 de junio se desplegará un contingente masivo de 12.000 agentes de seguridad. Además, las autoridades francesas han impuesto fuertes restricciones a los desplazamientos, dejando prácticamente aislada y perimetrada la sota normanda y las ciudades normalmente tranquilas que la pueblan.

Ya mañana viernes, la agenda de los actos por el 80 aniversario continuarán. Biden pronunciará un discurso en la Pointe du Hoc -un promontorio en lo alto de un acantilado, cuyos búnqueres alemanes fueron atacados por tropas estadounidenses en un audaz asalto- sobre la defensa de la libertad y la democracia. Macron también pronunciará ese día un discurso en Bayeux, la primera ciudad francesa liberada.

El 6 de junio de 1944, el Día D, tuvo lugar la que hasta entonces fue la mayor operación militar anfibia de la historia, en la que 7.000 buques y 9.500 aviones de todo tipo permitieron desembarcar en suelo francés a 132.000 soldados y 3.200 vehículos. Al final de esa primera jornada, los aliados habían asegurado una cabeza de puente en Francia desde la que empezar el ataque al corazón de Alemania, pero al precio de unas 10.000 bajas entre muertos y heridos. Tras más de dos meses de duros combates en la región, la batalla de Normandía terminó en Falaise, el 21 de agosto, con una sonada derrota nazi. A partir de ahí, los aliados lanzaron una rápida carrera hacia la frontera alemana, y la liberación de París llegó solo cuatro días después.