Consulta

La baja participación en el referéndum sobre la Guyana frustra los planes de Maduro

La imagen de los centros electorales casi vacíos marca la consulta popular sobre la región del Esequibo

«Jorge Rodríguez (presidente del Parlamento) anda como loco gritando por ese celular, creyendo que con amenazas va a lograr movilizar. Esta gente tiene el sol a la espalda. La tumba del madurismo nace en El Esequibo». El mensaje lo escribió en la red social X el exministro de Turismo, Andrés Izarra, ahora residente en Alemania y considerado un traidor de la «revolución bolivariana». Era todavía mediodía del domingo y daba cuenta del supuesto desespero de la cúpula gobernante de Venezuela por la baja participación en el referendo convocado sobre el diferendo territorial con Guyana.

Para la jornada se instalaron más de 15.000 centros electorales, pero durante todo el día hubo pocas imágenes que hablaran de un ánimo por votar extendido entre la población. Centros vacíos o con algunos pocos electores fueron la norma. En un recorrido hecho por LA RAZÓN por varios lugares de Caracas apenas evidenció la presencia de entre seis y diez electores en dos centros electorales. En el resto había más custodios militares que civiles votando. Pasadas las 2 de la tarde, algunos centros reportaban participación de un 30% en zonas tradicionalmente chavistas.

Una alcaldesa del chavismo, Marisel Velásquez, declaró desde el oriente del país que la poca afluencia respondía a que el voto automatizado es muy rápido y no daba tiempo de acumular personas en filas en los colegios. El presidente del Consejo Nacional Electoral, Elvis Amoroso, afirmaba también que la participación era masiva. «En este momento tenemos tres veces la participación a esta hora que ha ocurrido en otros procesos electorales», dijo al mediodía. No especificó con cuáles estaba comparando.

Ya dos semanas antes, durante un simulacro electoral, Amoroso afirmaba lo mismo: se había triplicado la participación, sin dar el número. Luego Maduro aseguró que en ese simulacro habían votado unos tres millones de personas, y que esperaba que este 3 de diciembre lo hicieran 12 millones. En Venezuela están habilitadas para votar en las urnas 20,6 millones de electores.

Este domingo, Nicolás Maduro puso la papeleta temprano, a primera hora, en Caracas. «Nos tomamos un café y directo al centro electoral, yo quería ser el primero en sentir esta emoción. Estoy muy emocionado», dijo. Agregó que con la consulta esperan mostrar un frente nacional unido para que Guyana «vuelva al Acuerdo de Ginebra y a los mecanismos de negociación pacífica y diplomática».

 La consulta electoral planteaba cinco preguntas para responder Sí o No sobre estar de acuerdo con el Laudo Arbitral de 1899 que entregó el territorio Esequibo a Guyana (y que Venezuela denuncia como ilegítimo), con el Acuerdo de Ginebra de 1966 (que plantea el diferendo y mecanismos para resolverlo), con no reconocer la jurisdicción de la Corte Internacional de Justicia (que ahora estudia el caso), con oponerse a que Guyana disponga de ese territorio y con instaurar un estado autonómico propio en esa franja de unos 160 mil kilómetros rica en petróleo, oro y otros recursos naturales (lo cual requeriría una modificación constitucional y pudiera ser violatorio del propio Acuerdo de Ginebra).

Varios dirigentes de oposición participaron, como Henrique Capriles, Henry Ramos y gobernadores en ejercicio, argumentando defender el voto como herramienta. La candidata presidencial opositora María Corina Machado se negó a hacerlo y calificó el evento como innecesario pues «la soberanía se ejerce, no se consulta».

Entretanto, se acumularon las denuncias de presiones en el sector oficial para participar, con listas de empleados estatales y de beneficiarios de programas sociales para ser chequeados al acudir a los centros electorales, so pena de castigos y exclusiones.

El pueblo de Guyana sale a la calle

El pueblo de Guyana salió este domingo a las calles para manifestarse a favor de «la preservación» del Esequibo, informa EFE. Los guyaneses se encontraron en distintas zonas de su país para formar una «cadena de manos», con el objetivo de enviar un mensaje de unidad ante la disputa con la nación vecina, que plantea en el referendo la anexión del Esequibo a su mapa, algo que Georgetown rechaza de manera categórica.

Durante la jornada, los guyaneses, que también marcharon y bailaron, ondearon su bandera y vistieron franelas con su mapa –que incluye al territorio disputado– y con la frase «Essequibo belongs to Guyana (El Esequibo le pertenece a Guyana)». En la actividad participaron varias autoridades, entre ellas el presidente Irfaan Ali, quien pidió este domingo a Venezuela actuar con «responsabilidad» a propósito de su referendo no vinculante.