La promesa de Trump que podría cambiar la vida de los estudiantes internacionales

Donald Trump ha comenzado a desvelar algunos de los rostros que le acompañarán durante su segunda legislatura al frente de la Casa Blanca, y que resultarán clave para trazar las líneas generales de su proyecto 'Make America Great Again'. Entre ellos se encuentra el congresista republicano, Mike Waltz, quien ostentará el puesto de asesor de seguridad nacional, determinante en la toma de decisiones en conflictos geopolíticos, Susie Wiles, que asumirá el puesto de jefa de gabinete en la Casa Blanca, o Elise Stefanik, como embajadora ante la ONU.

Otro de los nombres que ha cobrado relevancia en las últimas horas ha sido el senador cubano-estadounidense de Florida, Marco Rubio, quien, según apuntan distintos medios estadounidenses, podría asumir una de las carteras más importantes de la nueva administración Trump: la secretaría de Estado.

Además del nuevo gobierno, otro de los aspectos que quedan en el aire, son las medidas que el magnate prometió implementar si llegaba al poder. Promesas que han ido desde la desclasificación de archivos relacionados con el asesinato del expresidente John F. Kennedy, a la deportación masiva de inmigrantes.

La 'green card'

No obstante, el polémico candidato republicano sí parece contemplar algunas excepciones en esta dura política migratoria. Entre ellas se encontrarían los estudiantes extranjeros que ingresen en las universidades de Estados Unidos.

En plena campaña electoral, Donald Trump acudió como invitado al podcast All-In, donde fue preguntado por sus propuestas a la hora de atraer capital humano altamente formado hacia Estados Unidos. Fue entonces cuando el empresario aseguró: "Cuando te gradúas de una universidad, creo que deberías obtener automáticamente como parte de tu diploma una 'green card' para poder permanecer en este país", aclarando que "cualquiera que se gradúe de una universidad" podría beneficiarse de esta medida.

La 'green card' o Tarjeta de Residente Permanente, como su nombre indica, permite aquellos ciudadanos a quienes se les ha concedido vivir y trabajar permanentemente en Estados Unidos, y se trata de uno de los pasos imprescindibles para poder optar a la ciudadanía.

Trump continuó su alegato reconociendo que estar al tanto de historias de "personas que se graduaron de una universidad de primer nivel, y querían quedarse aquí, tenían un plan para una empresa, un concepto, y no puede, vuelven a la India, vuelven a China, hacen lo mismo en esos lugares y se convierten en multimillonarios, empleando a miles y miles de personas. Y podría haberse hecho aquí.