Los legisladores estadounidenses siguen sin ponerse de acuerdo para aprobar un nuevo paquete de ayudas a Ucrania y el dinero se acaba. Los republicanos están aprovechando la situación para exigir a los demócratas mayores reformas en materia migratoria y por eso el miércoles por la noche continuaron con su bloqueo de cualquier avance en el Congreso a favor de apoyar Ucrania. El tiempo también se acaba. Ambos bandos tienen ganas de llegar a un acuerdo que les permita avanzar en sus peticiones, pero la semana que viene habrá un receso de varios días por vacaciones y Ucrania no puede esperar. Por eso algunos senadores como el demócrata de Montana Jon Tester han asegurado que ¨si tengo que estar aquí el maldito día de Navidad, estaré aquí¨. Ha hecho hincapié en que el acuerdo es realmente importante y es crucial un compromiso por ambas partes.

La votación celebrada esta semana resultó por debajo del umbral de 60 votos que se necesita para la aprobación. Hubo 49 votos a favor frente a los 51 en contra del paquete de ayudas presentado de $111 mil millones de dólares destinados en gran parte apoyar a Ucrania, pero también a Israel. Este matiz fue el que frenó al senador demócrata Bernie Sanders, un independiente que por lo general vota con su partido, a rechazar la propuesta de los demócratas. Según una carta enviada por el senador por Vermont, sería ¨absolutamente irresponsable¨ apoyar a Israel con millones de dólares destinados a asistencia militar dado el creciente número de muertes civiles en Gaza. Por eso, el líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer, cambió al final su voto y dijo también ¨no¨ al paquete, para darle a su colega la opción de apoyar otro plan en el futuro más acorde a sus ideales. Schumer reconoció que había sido una ¨noche triste¨ pero los demócratas ¨siguen comprometidos a trabajar muy duro para encontrar una solución a este estancamiento¨. ¨Sin más ayuda del Congreso, Ucrania puede caer, la democracia en Europa estará en peligro y aquellos que piensan que Vladimir Putin se detendrá simplemente en Ucrania ignoran intencionalmente las advertencias claras e inequívocas de la historia¨. El líder de la mayoría dejó la puerta abierta a cualquier propuesta nueva que el partido republicano pueda ofrecer. ¨Espero que se les ocurra algo en serio, en lugar de las políticas extremas que han presentado hasta ahora¨.

Según el Instituto de investigación alemán Kiel Institute, las nuevas promesas de ayuda al país ucraniano desde que comenzó la invasión rusa cayeron a su nivel más bajo a principios de 2023. En Europa las ayudas se están encontrando con el muro que presentan algunos países reticentes, y en EE. UU. la cosa no está mejor. El resultado de estos frenos es un presidente ruso que se debe estar frotando las manos al ver como su enemigo se queda poco a poco sin apoyo internacional para defenderse de la invasión. ¨El presidente Putin ha expresado públicamente su idea de que, si cesa la ayuda militar de EE. UU., significará que Rusia derrotará a Ucrania¨, dijo en una entrevista televisada Jake Sullivan, el asesor de seguridad nacional estadounidense.

Sin embargo, según la cadena CNN, funcionarios del Pentágono ponen en duda que realmente la situación sea tan crítica. Según explica el medio, sus fuentes han dicho que ¨la administración podrá seguir ayudando militarmente a Ucrania durante el invierno, repartiendo los $4.800 mil millones de dólares restantes de la autoridad para enviar a Kiev armas desde los arsenales estadounidenses¨.

Los demócratas aseguran que la oposición está aprovechando la coyuntura para conseguir medidas migratorias imposibles de aceptar, ¨no se puede decir que estoy a favor de Ucrania solo si consigo que se promulgue está política que no tiene relación con la guerra¨, dijo el demócrata por Hawaii, Brian Schatz. Pero lo republicanos insisten en que cualquier ayuda a los aliados internacionales tendrá que venir acompañada de importantes cambios en la materia de seguridad fronteriza. E incluso aquellos que han defendido fervientemente armar a Ucrania, como el líder de la minoría Mitch McConell, ahora dicen que ¨aparentemente algunos de nuestros colegas preferirían dejar que Rusia pisotee una nación soberana de Europa antes de hacer lo necesario para imponer las fronteras soberanas de Estados Unidos¨, ha dicho el senador. ¨Están convencidos de que vale la pena poner en peligro la seguridad en todo el mundo solo para dejar las fronteras abiertas¨. El republicano McConell pide, junto a los suyos, más de $20 mil millones de dólares para aumentar las medidas de seguridad en la frontera. Un dinero que se invertiría en mayor presencia de patrullas, más agentes destinados a las gestiones que necesitan los solicitantes de asilo, así como un mayor esfuerzo destinado a los controles de fentanilo, una droga letal que llega al país procedente del exterior y que está acabando con millones de vidas en EE. UU.

Esta última votación refleja el cada vez menos interés del partido republicano por respaldar a Ucrania, una sensación que también empieza a verse en los estadounidenses que según las encuestas cada vez pierden confían menos en que haya que seguir brindando apoyo financiero a su aliado ucraniano.