Niña Pastori: «Vuelvo a mis orígenes»

-Tres años de gestación y por fin Niña Pastori da a luz y por partida doble. Una buena forma de estrenar año...
-La verdad es que es una manera estupenda de empezar 2009. Las sensaciones que he experimentado grabando el disco son muy diferentes al resto, la sensibilidad está a flor de piel. Mis canciones están llenas de cosas nuevas que desconocía por completo.
-¿Ayuda al proceso de creación el rodearse de la familia?
-A la hora de subirme a un escenario me influye mucho mi entorno. Además, mi marido ha sido el productor de «Esperando verte», y, como me conoce bien, sólo tenía que mirarme para saber cómo estaba, si tenía ganas de cantar o no. Es básico que el productor conozca al artista y sepa hasta dónde llega para sacarle el máximo partido.
-Mezcla en este disco su característico aroma flamenco con nuevos ritmos.
-Sí, a mí por ejemplo me gusta mucho la música brasileña, me encanta un artista que se llama Lenine, me identifico mucho con sus guitarras, sus melodías, porque tienen mucho que ver con el flamenco. En mi disco también hay mucho del pop, incluso rock en algunas canciones. Yo escucho todo tipo de música, y eso se nota en mis composiciones.
-¿De qué hablan los once temas de «Esperando verte»?
 -Sin duda alguna, la protagonista indiscutible de este disco es mi hija. Además, muchas de las canciones vuelven a mis orígenes con flamenco en estado pu- ro. Se pueden escuchar alegrías, fandangos, bulerías y alguna rumba como es el tema «Esperando verte».
-¿Encontraremos grandes colaboraciones como hemos escuchado en discos anteriores?
-Sí, Vicente Amigo es el invitado estrella del disco. Nunca había trabajado con él y ha sido un orgullo para mi marido y para mí. Mientras componía la bulería «El vagabundo», vi desde el principio a Vicente tocando la guitarra. Es un artista al que admiro.
-¿Cuál ha sido el secreto para atraerse al público?
-Creo que está en que nunca he ofrecido lo mismo. Dentro de mi estilo y personalidad he ido probando cosas nuevas: discos más para escuchar, otros para bailar, o incluso temas fuera del flamenco, como ya hice en «Joyas prestadas». Tengo un público fiel desde hace trece años. Esto es al final lo que desea todo artista: tener gente que te siga, que no seas una moda que pasa para ellos, sino que les guste lo que haces, que les siga apeteciendo verte en directo o comprar un disco tuyo.