El lado más personal de Melania Trump: así lleva adelante una familia muy peculiar

Melania Trump nació en Eslovenia hace 54 años. Hija de Amalija Knauss, diseñadora de joyas, y de Viktor Knauss, trabajador en la industria automotriz, comenzó sus estudios de arquitectura en la Universidad de Ljubljana, aunque pronto los abandonó para seguir su verdadera vocación: ser modelo. En la década de los 80, se traslada a Milán y luego a París, donde comienza a despegar su carrera en el mundo de la moda.

En 1996, Melania se muda a Nueva York donde protagoniza importantes campañas de publicidad. Es portada de revistas y desfila para diseñadores de renombre internacional. En 1998, durante una fiesta en Nueva York, conoce a Donald Trump y, aunque el está casado con su segunda esposa, Marla Maples, la atracción fue mutua. La pareja se dio el "sí, quiero" en Palm Beach, en enero de 2005. "Al casarme con Donald, me encontré navegando por la complicada dinámica de su gran familia", destaca en sus recientes memorias. La exmodelo reconoce que aquella situación "exigía flexibilidad y el hecho de abrirnos, pero cada momento era una oportunidad para crecer en ese nuevo entorno", añade también en "Melania".

En 2016, Melania Trump se convierte en primera dama de Estados Unidos tras la victoria electoral de su marido. Durante los cuatro años de mandato mantuvo un perfil discreto, llegándose a afirmar que a la exmodelo no le interesaba nada la carrera política de Trump. De hecho, tardó seis meses en mudarse a la Casa Blanca, supuestamente para no interrumpir el calendario escolar de Barron, su único hijo con el político.

Melania siempre ha dado prioridad a la educación y crianza de Barron, quien acaba de cumplir 18 años y se sabe que va a cursar sus estudios universitarios en Nueva York. Nunca se planteó aumentar la familia. "Yo sé lo ocupado que él está... y yo estoy a cargo de todo. Así que es por eso. Estoy completamente bien con uno porque tenemos una vida vida muy ocupada", aseguró en una entrevista en el programa Fox & Friends de la cadena Fox News.

Con respecto a los otros cuatro hijos que Donald Trump tuvo de sus anteriores matrimonios (Donald Jr, Ivanka y Eric, de su relación con Ivanna Trump; y Tiffany, de su historia con Marla Maples), Melania explica en sus memorias que "mi enfoque para construir relaciones con sus hijos siempre se ha basado en el amor y el respeto", añadiendo que estos ya eran "independientes" cuando los conoció por primera vez. "Mi papel no ha sido reemplazar a sus madres, sino fomentar una conexión amistosa y de apoyo", asegura.

La sombra de la crisis matrimonial siempre le ha perseguido, más aún en los últimos años en los que el republicano fue condenado por un delito de abuso sexual y difamación a la excolumnista E. Jean Carroll.

Al término de su mandato presidencial, la pareja se instaló en su residencia de Mar-a-Lago, en Florida. Ahora, cada vez más cerca de volver a ser primera dama estadounidense la gran pregunta es si volverá a la Casa Blanca.