Carmen Martínez Bordiú y Roberto Federici: 20 años de la ruptura de un amor intenso

Han sido varios los hombres que han presumido de haber conquistado el corazón de Carmen Martínez Bordiú, pasando por su vida con mayor o menor acierto. Suele decirse mucho eso de que “de una boda sale otra boda”, pero poco se habla de cuántas rupturas salen a cuentas. En el caso del enlace que unió a Luis Alfonso de Borbón con Margarita Vargas en República Dominicana en 2004, al menos sí determinó el final de la relación de su madre con el arquitecto italiano Roberto Federici, con el que mantuvo una intensa historia de amor que perduró durante 11 años. Ahora bien, parece que lo suyo ya estaba roto de antes de que el hijo de la ‘nietísima’ intercambiase alianzas y le jurase amor eterno a la que a día de hoy sigue siendo su esposa, 20 años después. Las mismas dos décadas que se cumplen ahora de la sonada ruptura de Carmen y Roberto, protagonizando el escándalo mediático del momento.

“Hay veces que se forma una pareja y se deshace otra. Así es la vida”, confirmaba como si tal cosa Carmen Martínez Bordiú que su relación con Roberto Federici había terminado. Más de una década formando equipo en lo sentimental que llegaban a su fin a finales del 2004, dos semanas después de la boda de su primogénito. No quiso hacerle sombra o que su desamor enturbiara lo enamorado que él iba al altar con la que a día de hoy es la madre de sus cuatro hijos. Aun así, pese a la discreción con la que quiso llevar el asunto, el revuelo fue mayúsculo. Más porque se les consideraba una pareja ideal, que llevaban once años enamorados, después de muchos más siendo amigos íntimos, cuando él era el novio de Ira de Fürstenberg, recientemente fallecida, con la que estuvo durante cuatro años. Ella, por su parte, estaba con Jean-Marie Rossi, también fallecido. El reencuentro de los amigos les hizo estrechar más aún su relación, llevándoles a iniciar un romance que fue muy seguido por la prensa del momento.

Lo cierto es que todo hombre que ha tenido un papel destacado en la vida de Carmen ha gozado de popularidad. Pero con Roberto Federici vivió un amor aparentemente idílico a ojos del mundo, paseándolo por los acontecimientos sociales más importantes de la aristocracia patria. Así acudieron juntos a la espectacular boda sevillana de Francisco Rivera y Eugenia Martínez de Irujo, acaparando todas las miradas, aunque allí se juntó lo más granado de la sociedad española. Pero también disfrutaban de escapadas recorriendo mundo, conociendo rincones perdidos, mientras afianzaban un romance que parecía ser perfecto. Pero no era todo tan bonito como se vendía de cara a la galería o como el público presuponía.