Liz Garbus, directora del polémico documental de Netflix “Harry y Meghan” ha concedido una entrevista a la versión estadounidense de la revista “Vanity Fair” en la que rompe su silencio y defiende a los duques de Sussex al acusar a la Casa Real británica de mentir públicamente.

 “Los miembros de la familia real se negaron a comentar sobre el contenido de la serie”, aclara el documental en su primer episodio. Lo cierto es que aunque los Windsor se negaron a participar en el formato, sí se encargaron de difundir el rumor de que en ningún momento los departamentos de comunicación habían sido contactados para tal afirmación. Ante la insistencia de la plataforma de que había contactado tanto con el gabinete de Carlos III como del príncipe William, el Palacio de Kensington reconoció finalmente tener un mail de la productora pero no de los Sussex ni de Netflix. Además confirmaron haberlo contestado para verificar la fuente, aunque no obtuvieron respuesta.

“Lo hicieron para desaclreditarnos… y al desacreditarnos pueden desacreditar el contenido del programa”, ha sido la respuesta de Liz Garbus. “Dijeron que no solicitamos comentarios cuando sí lo hicimos”, ha seguido explicando.

“No siento que [cuestionar] la monarquía sea un sacrilegio, de la misma manera que no siento que [cuestionar] al gobierno estadounidense sea un sacrilegio. Es nuestro papel como narradores y pensadores críticos plantear estas preguntas”, responde ante las acusaciones de intentar acabar con la institución.

El estreno de “Harry y Meghan” registró un total de 81,55 millones de horas de visualización en todo el mundo y más de 28 millones de hogares conectaron, al menos, durante unos minutos con el formato.

“Ciertamente vieron este documental, y lo ven, en gran medida, como su historia de amor. Su interés era mucho más en contar su historia de amor desde su punto de vista, a diferencia de la historia de amor contada por otros, y compartir su archivo personal para tener ese punto de vista. Mira detrás de la cortina”, explica sobre el éxito de la docuserie.

Sobre la colaboración de los duques de Sussex, ha destacado que “estaban muy abiertos y dispuestos a viajar por algunos de los caminos que quizás no hubieran considerado originalmente. [La historia de amor] es la columna vertebral, pero, para mí, siempre fue necesario… conectar los puntos con la historia personal y el contexto histórico más amplio”.