Dimisión
Pleno I después de Lesmes: el CGPJ debate su sustitución
Los vocales abordan hoy, sin presidente, quién asumirá a partir de ahora sus funciones de forma interina
El Pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) se reúne hoy en un Pleno extraordinario convocado por Lesmes, pero sin Lesmes. El ya expresidente del órgano de gobierno del Poder Judicial –ayer mismo se publicó finalmente su cese en el Boletín Oficial del Estado (BOE)– había convocado esta sesión plenaria con la intención de desencallar la renovación del Tribunal Constitucional (TC), pero la reunión servirá, sobre todo, para articular la sucesión de Carlos Lesmes al frente del Consejo.
No puede haber una designación como tal. El Consejo está incapacitado por ley para efectuar nombramientos desde marzo del pasado año, cuando entró en vigor la ley que le recortó esa competencia mientras siguiera en funciones, con la que PSOE y Podemos pretendían forzar al PP a negociar la renovación del CGPJ, cuyo mandato expiró en diciembre de 2018. Se trata, explican fuentes de la institución, de decidir «quién asume las funciones del presidente de forma provisional».
Pero, además, el Pleno tiene previsto hacer pública una declaración de respaldo y reconocimiento a quien ha sido su presidente los últimos nueve años. La intención es que el documento, que se ha consensuado en las últimas 48 horas, sea avalado de forma unánime, por lo que unos y otros han tenido que hacer concesiones.
El informe de Lesmes
De hecho, según las fuentes consultadas ya se había llegado a un acuerdo sobre una declaración que pretendía trasladar tranquilidad sobre el normal funcionamiento del CGPJ ante la inminente renuncia de Lesmes, un texto que no obstante quedó desbordado por los acontecimientos desde que el pasado domingo por la noche anunció su intención de dimitir al día siguiente, como finalmente hizo, ante el desdén político a sus llamamientos para que se desbloqueara la renovación del Consejo (o se le devolvieran las competencias para cubrir las vacantes judiciales). Una puerta que, sin embargo, ahora vuelve a entreabrirse tras la reunión de Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo.
Aunque, como se ha apuntado, más allá de ese gesto de reconocimiento público hacia Lesmes, los vocales deberán abordar en primer lugar quién asume sus funciones (de lo que depende, que no es poco, que el Pleno quede válidamente constituido). Y es que esa cuestión sucesoria no es pacífica. Lesmes, como apunta uno de los vocales, pensó dejarlo todo «atado y bien atado» al señalar al presidente de Sala más antiguo del Tribunal Supremo (TS) como su sustituto provisional al frente del alto tribunal y del CGPJ. Quien debía sustituirle es el magistrado Francisco Marín, que hasta ahora ejercía asimismo de forma interina las funciones del vicepresidente del Supremo desde la jubilación, en octubre de 2019, de Ángel Juanes.
El hasta ahora presidente sustentó su decisión en un informe del Gabinete Técnico que concluía que la sucesión de Lesmes no podía ser bicéfala y que, por tanto, en ausencia de un vicepresidente del TS debe ser quien asume esas funciones interinamente, el presidente de Sala más antiguo, el que también se haga cargo de la sustitución provisional del presidente tras hacerse efectiva su renuncia.
El vocal más antiguo
Pero la mayoría de los vocales de uno y otro signo sostienen que, sea cual sea la solución, ésta no puede tomarse de espaldas al Pleno. De momento, siete vocales progresistas incluyeron el pasado lunes en el orden del día del Pleno la «valoración» de los consejeros (ahora reducidos a 18) del cese de Lesmes, así como, en su caso, las decisiones que «legalmente procedan».
Algunos vocales esgrimen un informe de 2019, también del Gabinete Técnico del CGPJ, que apuntaba al vocal más antiguo (en este caso el progresista Rafael Mozo) como sustituto natural del presidente en el Consejo ante una ausencia prolongada (dado que para entonces Juanes ya se había jubilado). «Tenemos dos informes contradictorios y ninguno era necesario», apuntan fuentes del Pleno, que cuestiona que un letrado del CGPJ «tenga que venir a 18 juristas de reconocido prestigio a decirnos cómo se lleva a cabo la sustitución».
La cuestión oscila, por tanto, entre el magistrado de la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo Francisco Marín y el vocal del CGPJ Rafael Mozo (que parece la opción mayoritaria, aunque no unánime). La decisión tendrá consecuencias, no solo en el Pleno (la mayoría de 3/5 para elegir a los jueces del TC, por ejemplo, se reduciría a once vocales en lugar de doce), sino también en la Comisión Permanente, integrada por siete vocales (cuatro de procedencia judicial y tres juristas) y al frente de la cual está el presidente. Si Mozo fuera elegido (ya es miembro de la comisión), el Pleno debe decidir si ésta queda reducida a siete miembros.
✕
Accede a tu cuenta para comentar