Emprendedora
«EAE Business School me enseñó que mi historia es única» Bárbara Plazas
Emprendedora y fundadora de Makes Sense Lab, fue alumna de EAE Business School Madrid, perteneciente a Planeta Formación y Universidades.
Hace siete años, Bárbara Plazas, licenciada en Psicología e interesada en la neurociencia, emprende con una empresa de aromas personalizados. Estudiosa de la capacidad olfativa y defensora del efecto que los aromas pueden tener en memoria y emociones, arranca Make Sense Lab, que recibió el impulso necesario por parte de EAE Business School Madrid, perteneciente a Planeta Formación y Universidades y en la que confían empresas como el Teatro Eslava en Madrid.
¿De dónde surge la idea?
Hace años que nos preocupamos y construimos marcas desde lo visual, pero pocas veces pensamos en marcas que conecten en todos los niveles. El marketing olfativo es algo que se viene haciendo hace un buen tiempo, pero lastimosamente no tanto como se podría y, sobre todo, no con el rigor y la responsabilidad que significa, sin el conocimiento técnico y neurológico que se requiere para entender el efecto de un aroma en nuestro cerebro. Vi la oportunidad de hacer branding olfativo mejor, uniendo mi formación y experiencia con una oportunidad de mercado.
¿Cómo se realizan estos aromas personalizados?
En nuestro caso estamos concentrados en branding olfativo, fragancias para marcas que quieren conectar con el olfato y ser memorables. Para ello hacemos un estudio exhaustivo de la marca: su identidad, estrategia, posicionamiento y mercado, para luego proponer de acuerdo a todo esto una pirámide olfativa y posibles acordes o fragancias para la marca, que encajen perfectamente con su posicionamiento y les permitan diferenciarse del mercado.
¿Cómo se realizan las pruebas por parte del cliente?
El cliente vive el proceso con nosotros. Cuando llegamos a nuestra prueba olfativa ya sabe lo que olerá y cuál es la intención de las fragancias para que pueda oler las muestras de opciones con criterio. Además, hacemos una prueba muy especial porque descomponemos la fragancia y la olemos para que el cliente vea cada faceta de ella.
¿Qué pasa si a un determinado cliente no le convence vuestra primera propuesta?
Seguimos trabajando hasta que sea perfecta y refleje lo que queremos de la marca para conectar con las personas, siempre acompañando y dando nuestro criterio para asegurarnos que la fragancia cumplirá con las expectativas.
¿Qué diferencia vuestra propuesta de otras empresas de fragancias?
Varias cosas, pero si tuviera que destacar algo serían dos cosas. La primera, la rigurosidad científica con la que lo hacemos, con un corpus de conocimiento neurológico y de branding que le da un suelo sólido a lo que hacemos. La segunda, el compromiso con la sostenibilidad. En la industria cosmética se utilizan muchas materias primas de fuente animal o nocivas para la salud. El propósito de Makes Sense Lab es contar historias olfativas que honren el planeta en el que vivimos, y eso pasa por elegir las mejores materias primas que no pongan en riesgo la salud de quienes las huelen.
¿Qué papel ha jugado EAE Business School Madrid en vuestra andadura?
Me ayudó sobre todo a conectar con gente maravillosa, y aún hoy sigo en contacto constantemente con varias personas que me trajo mi paso por la escuela. Me permitió conocer historias inspiradoras de emprendimiento y aprender que la mía es única, y que solo yo puedo darle forma. Makes Sense Lab formó parte de la incubadora de EAE Emprende en 2019. Es un programa de incubación de tres meses enfocada a los estudiantes de la escuela. El programa cuenta con expertos del sector y mentores que son emprendedores e inversores experimentados.
¿Hubierais llegado hasta aquí sin este soporte y ayuda? ¿Por qué?
Posiblemente estaríamos aquí pero el camino hubiese sido mucho menos enriquecedor. Toda la red de personas que me trajo la universidad ha aportado un granito de arena a Makes Sense Lab y eso nos hace una empresa mucho más interesante y expuesta al mundo.
¿Qué recomendarías a otros emprendedores para que lograran el éxito como vosotros?
Yo suelo decir que soy emprendedora por accidente. Nunca pensé en emprender como mi sueño, aunque sí en hacer lo que me gusta. Si lo que tengo que hacer para lograrlo es montar una empresa, pues ¡bienvenido sea! Mi mejor consejo para otros emprendedores puede ser que busquen hacer algo que les interese de verdad, que les guste y no solo algo que suene como «una buena idea». Así garantizan que serán más perseverantes. Y si puedo añadir algo sería que disfruten el camino. En mi opinión, no hay que sufrir para emprender, ¡lo contrario! Hay que disfrutar el camino para emprender.
✕
Accede a tu cuenta para comentar