Economía

La oficina de transformación comunitaria de la Ciuden pone en marcha cinco comunidades energéticas en León en su primer año

TransenerCyl también colabora en la creación de otras seis en la provincia de Orense

Gerardo Álvarez Courel, Javier Quiñones, Yasodhara López y Héctor Alaiz durante la presentación de los datos
Gerardo Álvarez Courel, Javier Quiñones, Yasodhara López y Héctor Alaiz durante la presentación de los datosCésar Sánchez/Ical

La oficina de transformación comunitaria de la Fundación Ciudad de la Energía, TransenerCyl, que pretende ayudar a la creación de comunidades energéticas, consigue iniciar cinco proyectos en la provincia de León durante su primer año de vida. Se trata de comunidades que aún tienen por delante un proceso de desarrollo vinculado a la energía fotovoltaica.

Así se expuso hoy durante la presentación de los resultados del primer año de trabajo de esta oficina, con la que se busca explicar a los ciudadanos las ventajas que tienen estas comunidades energéticas con las que pueden generar y consumir su propia energía verde y, por tanto, rebajar de forma sensible sus facturas. A partir de ahí asesoran y ayudan en su desarrollo.

“Se trata de que el ciudadano se ponga en el centro de la producción y consumir energía, que tenga la batuta sobre su energía, siempre verde y renovable. Abre muchas posibilidades tanto a nivel empresarial como del medio rural", dijo la directora de Ciuden, Yasodhara López.

El director de I+D+i de Ciuden, Javier Quiñones, fue el encargado de ofrecer los detalles sobre las cinco comunidades energéticas que han iniciado su andadura en la provincia “para descarbonizarla”. Estos proyectos se sitúan en Cubillos del Sil, Lillo del Bierzo, en el municipio de Fabero, e Igüeña, que partían de cero. También se asesoró a otra que ya estaba creada, que es en Bembibre. Y se suma una más en la localidad de Rioseco de Tapia. A esto se suma el asesoramiento a otras seis comunidades energéticas en la provincia de Orense, informa Ical.

Estas agrupaciones, que aún son incipientes y tendrán que desarrollarse, apuestan por la energía fotovoltaica con almacenamiento. En Rioseco de Tapia participan unos 150 vecinos, en Cubillos hay 30 inscritos, en Bembibre hay cinco. Todas ellas están abiertas a crecer. “Aún queda un largo camino”, puntualizó Quiñones.

“Hemos aprendido mucho. Lo mejor es la colaboración entre todos”, aseguró Quiñones, quien avanzó que en la jornada de hoy se presentará un caso de éxito en un pueblo de Salamanca. Allí cuentan con una instalación fotovoltaica y se han desconectado de la red, generando su propia energía y enriqueciendo el pueblo, incluso con un coche eléctrico que todos pueden usar.

Por su parte el subdelegado del Gobierno en León, Héctor Alaiz, se felicitó por el éxito de esta oficina, financiada por el Instituto para la Diversificación Enegética, IDAE. La inversión del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico para estas oficinas en todo el territorio fue de 1,7 millones de euros y Castilla y León es la tercera comunidad donde se han implantado estos proyectos.

Desde la Diputación de León su presidente, Gerardo Álvarez Courel, quien también es concejal en el Ayuntamiento de Bembibre, se refirió a la comunidad energética de su municipio. “Estamos empezando para poder ser todo aquello que perseguimos, sostenibles, reducir consumos, un trabajo en común de entidades, personas y empresas. Siempre lo enfocamos a lograr un polígono industrial verde en nuestro municipio”, dijo. Añadió que desde la Diputación apoyan estas iniciativas.

El día se cierra con una mesa redonda con otras oficinas para poner en común el trabajo desarrollado y a qué retos de han enfrentado.