Este es el pueblo más frío de España: con temperaturas medias de 8 grados durante todo el año

En la provincia de Teruel, dentro de la comarca de la Sierra de Albarracín, se encuentra un pequeño pueblo que ha ganado reconocimiento como el más frío de España incluso durante el verano. Con temperaturas medias anuales que rondan los 7 y 8 grados, este destino se ha convertido en el refugio ideal para quienes buscan escapar del calor extremo en épocas cuando es más que necesario. Sin embargo, su entorno natural privilegiado y su oferta cultural lo convierten en un lugar perfecto para el turismo.

Este pueblo es Griegos, una joya situada a 1.604 metros sobre el nivel del mar. Rodeado de paisajes de ensueño, como la dehesa la Mayor y la imponente Muela de San Juan, Griegos combina un clima agradable con vistas espectaculares. En verano, las pistas de esquí de la Muela se transforman en senderos y rutas ideales para los amantes del ciclismo, el senderismo y los paseos a caballo, ofreciendo una experiencia inigualable para disfrutar de la naturaleza en su máxima expresión.

¿Qué hacer en Griegos?

Griegos no solo es un paraíso natural; también cuenta con un rico patrimonio cultural. Sus monumentos históricos, como la iglesia parroquial de San Pedro, del siglo XVI, y la ermita de San Roque, reflejan la tradición y la historia de este pequeño municipio. Además, "La Casa de las Mariposas", un espacio dedicado a la entomología, ofrece a los visitantes una oportunidad única de conocer la biodiversidad local a través de exposiciones de insectos autóctonos.

El municipio ofrece numerosas actividades al aire libre. Las rutas de senderismo que atraviesan la sierra permiten explorar la flora y fauna autóctonas mientras se disfrutan de vistas panorámicas únicas. Los paseos en bicicleta y a caballo son otras opciones populares entre los visitantes que desean adentrarse en los alrededores. Además, la cercanía a los nacimientos de los ríos Tajo y Turia agrega un atractivo especial para aquellos que buscan un contacto más cercano con la naturaleza.

El pueblo también es un ejemplo de cómo las tradiciones locales y las festividades aragonesas pueden enriquecer la experiencia de cualquier visitante. Griegos celebra eventos que permiten a los turistas sumergirse en la cultura local, disfrutar de la gastronomía de la región y conocer de cerca el estilo de vida de sus habitantes.