La DPH ha aprobado una partida de 120.000 euros destinada a apoyar a las pequeñas y medianas empresas (pymes) y autónomos afectados por el cierre del paso fronterizo del Somport. Este cierre, que afecta directamente a la economía local, fue provocado por un deslizamiento de 50 metros en la carretera francesa RN-134, consecuencia de las fuertes lluvias de la DANA del pasado 7 de septiembre.

La iniciativa busca paliar las consecuencias económicas que sufren numerosos negocios que dependen de la actividad vinculada a este paso fronterizo. El presidente de la DPH, Isaac Claver, subrayó la importancia de actuar con rapidez ante la emergencia económica que enfrentan los empresarios y autónomos de la zona. Según Claver, "es crucial que las instituciones estén al frente del apoyo a quienes han visto afectada su actividad por este cierre".

Las Cortes de Aragón también reclaman ayudas

La Diputación ha dado el primer paso con esta ayuda, pero Claver insiste en que es necesario un esfuerzo conjunto de todas las administraciones: "Necesitamos que ayuntamientos, comarcas, la comunidad autónoma y el Gobierno central se sumen a esta iniciativa. Hemos visto cómo la coordinación entre instituciones es esencial en casos de catástrofes".

La preocupación por el impacto económico del cierre del Somport ha llegado también a las Cortes de Aragón. Recientemente, se aprobó una solicitud al ejecutivo autonómico y al Gobierno de España para que desarrollen líneas de ayudas destinadas a los negocios afectados. Esta medida complementa la acción de la DPH, que ya trabaja en la creación de las bases necesarias para distribuir los 120.000 euros entre los afectados.

Los representantes políticos han destacado que, además de estas ayudas directas, es necesario que se agilicen los trabajos de reparación en la carretera RN-134 para restablecer el tráfico lo antes posible.

Impacto económico en la zona

El paso del túnel del Somport es una infraestructura clave para la conexión entre España y Francia. Su cierre ha dejado a numerosos negocios locales sin una de sus principales vías de acceso a mercados y clientes. Las pequeñas empresas y los autónomos, que ya enfrentan desafíos económicos derivados de otros factores, se encuentran ahora en una situación límite.

Sectores como la logística, el transporte de mercancías, la restauración y los alojamientos turísticos han experimentado un descenso en su actividad. Según los afectados, las pérdidas económicas son significativas y podrían agravarse si la situación persiste.