Cultura

Una conmemoración del 29 para estrechar relaciones con América

Sevilla presenta «un proyecto de futuro de cuatro años» y la intención de celebrar unos

200 eventos

Presentación del Plan Estratégico del Centenario de la Exposición Iberoamericana de 1929.
Presentación del Plan Estratégico del Centenario de la Exposición Iberoamericana de 1929.EP

La conmemoración del centenario de la Exposición Iberoamericana de 1929, que hace un siglo transformó la ciudad de Sevilla hasta incorporarle un área urbana de las mismas dimensiones que su casco histórico, aspira a establecer las bases para una relación permanente con América y Portugal. Así lo anunció ayer el comisario de esta conmemoración, Julio Cuesta, en la presentación del Plan Estratégico Sevilla 2029, diseñado para la celebración del centenario de la Exposición Iberoamericana, uno de cuyos hitos es la Plaza de España de Sevilla, ubicada cerca de la quincena de pabellones de los países participantes en aquel acontecimiento, un legado arquitectónico y cultural que ahora será restaurado e inventariado.

Junto al alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, el comisario para la conmemoración aseguró que el plan estratégico aspira igualmente a dejar «una referencia viva de la celebración» que se base en la capacidad de innovación y creatividad y en la aplicación de valores y compromisos.

«La Exposición Iberoamericana no fue una mera feria, sino un homenaje a la vinculación con América», señaló Julio Cuesta al demandar «unanimidad» de todas las administraciones para que la próxima celebración, que definió como «un proyecto de futuro de cuatro años», sirva igualmente para generar cooperación cultural, académica, económica y turística entre España y América.

El Plan Estratégico incluye 31 áreas temáticas, desde la aeronáutica a la marítima y de la cinematográfica a la de la artesanía y el folclore pasando por las conmemoraciones históricas de los acontecimientos que Sevilla y España vivieron entre 1926 y 1930. Hay que recordar que la Iberoamericana de Sevilla se clausuró en junio de 1939, aunque la Exposición Internacional de Barcelona se cerró a finales de 1929.

Esas 31 áreas temáticas incluye casi doscientos actos, en un programa que el comisario insistió en calificar de flexible, con la idea de incorporar iniciativas, actividades, certámenes y congresos que se plateen desde España y América, como la celebración de un Congreso de la Lengua –aún no programado pero que se está alentando– y otro de las Lenguas de América, que sería el primero de la historia.

La comisaría del centenario ha planteado la solicitud del establecimiento en Sevilla de la Casa de América, ahora con sede en Madrid, y el estreno de la ópera «La Atlántida», que Manuel de Falla compuso para su estreno en la Exposición Iberoamericana, que finalmente no se llevó a cabo.

Entre los hitos de carácter simbólico y festivo, el comisario planteó –como sucedió en 1929– los días y las semanas de los 19 países participantes en la Exposición Iberoamericana, una idea que será tratada en las cumbres de embajadores que se convocarán próximamente y que también tratarán la posibilidad de celebrar una cumbre iberoamericana en Sevilla en 2030.

Igualmente se ha planteado la rememoración de la ceremonia inaugural de la Exposición Iberoamericana, a la que asistió la familia real y el Gobierno de España, además de las representaciones de los países y empresas participantes. Aunque la conmemoración no requerirá de una estructura orgánica propia, el Plan Estratégico sí incluye la creación de una entidad, que podría tener forma de fundación para que mantenga después de la celebración «el espíritu del 29».