San Isidro 2018, en datos

El San Isidro más largo de la historia se despidió el pasado domingo marcado como uno de los más lluviosos

El San Isidro más largo de la historia se despidió el pasado domingo marcado como uno de los más lluviosos. Tanto que los tendidos de sol, junto con las gradas y andanadas, se hacían con el privilegio de los de sombra y las primeras filas. 34 tardes en las que miles de personas han respirado a ritmo de capote.

«Hasta el 40 de mayo no te quites el sayo». Y hasta esta fecha han estado los madrileños en los tendidos de Las Ventas. Con su sayo. Una feria que ha estado marcada por grandes triunfos y por pequeños detalles. Más allá de las 35 orejas cortadas, de las puertas grandes de Talavante, López Simón y Sebastián Castella; y aparte de la historia que firmaba Diego Ventura cortando un rabo, esta Feria tiene nombres propios. Jiménez Fortes y Octavio Chacón representan el peso que tienen las vueltas al ruedo en Madrid. Esas que, en el caso de los astados, causan el efecto contrario. «Asturdero», de Saltillo, ha sido el único toro en ver el pañuelo azul del palco. Un pañuelo que podrían haber visto «Licenciado», de Alcurrucén; «Chaparrito», de Adolfo Martín; el de Juan Pedro Domecq, «Ombú»; y quién sabe si alguno de los guapos «pablorromeros» que no pudieron pisar el ruedo por la lluvia. Hasta el año que viene, San Isidro.